Tarde, pero ha llegado. El Ayuntamiento de Barcelona rendirá homenaje a Jordi Sabater Pi, considerado el padre del Copito de Nieve, el gorila albino fallecido en 2003 qeu se convirtió en todo un símbolo de la ciudad. El científico barcelonés, que hizo posible la llegada del emblemático animal a la capital catalana, dispondrá de una calle con su nombre en el nuevo vial que va desde la calle de Pare Manyanet hasta la calle de Felip II, en el distrito de Sant Andreu.
Con este anuncio, el gobierno de Jaume Collboni pone fin a las trabas de la exalcaldesa Ada Colau para llevar a cabo este reconocimiento. En un primer momento, los comunes justificaron su rechazo al considerarlo un resultado del "colonialismo" para hablar, posteriormente, de un problema logístico ante la propuesta de instalar una escultura del animal.
Ahora, el gobierno socialista ha dado respuesta a una propuesta presentada por el PP que se aprobó en la Comisión de Derechos Sociales del pasado mes de diciembre, a falta de cumplir con el compromiso de instalar una estatua dedicada al primate.