La empresa indonesia Avani Eco ha creado una bolsa de plástico ecológica y biodegradable que se disuelve en agua en cuestión de segundos e incluso puede comerse.
Esta sorprendente innovación está confeccionada a base de yuca, un alimento básico en muchos países de África, América Latina y Asia. El procesado de este tubérculo da como resultado una bolsa de una textura que se asemeja al plástico, pero completamente degradable y compostable, es decir, que se degrada en contacto con el resto de residuos orgánicos convirtiéndose en abono.
"Nuestro país se está ahogando en plástico", refiere Kevin Kumala, director de ecología de la empresa con sede en Bali. Debido al insumo natural con el que está confeccionada, estas bolsas son tan seguras que si los animales se la comen, no les causa ningún daño, asegura la compañía.
La misma empresa no sólo produce bolsas de yuca, también fabrica otros artículos como chubasqueros, enseres de hostelería y cubiertos.
CIFRAS ALARMANTES
Al menos ocho millones de toneladas de plástico se abren camino hasta el océano cada año. Esto es el equivalente a arrojar el contenido completo de un camión de basura al océano por minuto.
Solo el 14 % de los envases de plástico se recupera para reciclaje, mientras que la gran mayoría se usa una sola vez.