El gobierno de México ha concedido al director del Barcelona Supercomputing Center y Doctor honoris causa de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), Mateo Valero, la Orden Mexicana del Águila Azteca, la máxima distinción que concede el estado mexicano a extranjeros que han prestado servicios prominentes a la nación.
Su distinción responde a su destacada contribución al desarrollo científico en México, en particular, al área de computación de alto rendimiento, su trayectoria de investigación reconocida a nivel mundial y además ha representado un actor clave en el desarrollo de la computación de alto rendimiento en México, según consta en el el Diario Oficial de la Federación (DOF), la publicación oficial del Gobierno Constitucional de México. Así lo leía ayer la Cónsul General de México en Barcelona, María Carmen Oñate.
La embajadora de México en España, Roberta Lajous, aterrizó en Barcelona desde Madrid y fue la encargada principal de la entrega de la insignia. La diplomática señaló el acto como ‘algo muy singular’. Tras el recibimiento, Valero, dedicó su condecoración a muchos de “los colegas de investigación” presentes en el acto y en especial, a Ulises Cortés, catedrático en Inteligencia Artificial de la UPC, quien le dedicó un prólogo previo al guión institucional.
Entre las muestras de afecto y cariño recibidas, Valero adelantó sus ganas de seguir trabajando con México anunciando un posible proyecto para la gestión de hidrocarburos de la mano de la Secretaría de Energía del Estado mexicano con el Barcelona Supercomputing Center. El académico honorado aboga por el uso ético de las tecnologías. El constructor de puentes científicos solo tuvo palabras de agradecimiento. Humilde y familiar con los suyos, a quienes también les gratificó con emoción, más que con palabras por el apoyo recibido a lo largo de su vida.
Valero explicó que Veracruz había sido su puente de entrada y de conexión a México, un país que ama. Prueba de ello es su afición a las rancheras, un detalle que no quiso saltarse la oficina consular, que se encargó de amenizar la cita, por unos momentos, con un grupo de mariachis.
El Doctor Mateo Valero, es una de las 90 personalidades distinguidas con este reconocimiento que se concede desde 1932. Bandas, collares, cruces e insignias corresponden a una selecta distinción de grados entregados a personas del mundo empresarial, institucional, cultural, Premios Nobel, diplomáticos, de la Monarquía y del Estado; como Bill Gates, Walt Disney o Nelson Mandela.