Este miércoles, el Senado argentino vota si definitivamente aprueba el Proyecto de Ley de Despenalización y Legalización, tras el sí del Congreso el pasado 13 de junio y previa a esta decisión jurídica, los grupos feministas han vuelto a salir a las calles.
En esta ocasión, los colectivos de Santiago Maldonado de Barcelona y Marea Verde Barcelona han convocado la concentración feminista a la que se han unido otras personas en pro del aborto universal a los pies de la oficina consular argentina para reivindicar el aborto voluntario y gratuito en su país.
Como viene siendo costumbre, los integrantes de este movimiento civil (al que cada vez, se suman más hombres), han lucido el ‘pañuelazo’ verde que les caracteriza gritando a favor para decidir sobre su propio cuerpo.
Dos miembros de Marea Verde Barcelona han entregado un manifiesto a las dependencias del consulado argentino exigiendo una respuesta antes del próximo 8 de septiembre, ya que, según las remitentes, en junio no se les garantizó que su reclamo llegase a ninguna autoridad responsable sobre el tema. El manifiesto expresa la preocupación del colectivo feminista por los abortos clandestinos y las muertes que así se provocan todos los años.
Rosario, de la comisión Santiago Maldonado, ha agradecido las adhesiones de todas las personas que han firmado el manifiesto y también a los que han asistido para apoyar el movimiento.
LEMAS REIVINDICATIVOS
Con el bombo de fondo, las decenas de argentinas residentes en Barcelona han cantado un Padre Nuestro con letra feminista: “concédenos el milagro del aborto libre”.
Así como “si el Papa fuera mujer, el aborto sería ley”. Cantos reivindicativos bajando el torso y poniéndose derechas, las argentinas tienen claro lo que quieren: la aprobación del Proyecto de Ley de Despenalización y Legalización de la interrupción voluntaria del embarazo.
Sea cual sea la decisión de hoy en el Senado, las argentinas claman a todos los que quieran unirse a la causa, concentrarse a las 20 horas en la plaza de Sant Jaume por un aborto libre.
LUCHA INTERNACIONAL
A este ‘pañuelazo’, hoy se han sumado otras ciudades como Londres, Nueva York y Ciudad de México.
Si Argentina lo consigue, será un hito para toda América Latina, después de Cuba y Uruguay; dos países que ya permiten abortar en las primeras catorce semanas sin restricciones específicas (como en Chile) y universal. Brasil tiene el debate abierto en el poder judicial.
A día de hoy, en Argentina se producen 400.000 abortos anuales clandestinos y más de 50.000 hospitalizaciones por malas prácticas.