Inaugurado el año 2019 llegan más estudios que nos aseguran que harán de nuestra vida algo mejor. El ‘Enero seco’ es la investigación de la Universidad de Sussex que ya propuso el año pasado a 800 estudiantes beber cero alcohol durante todo enero, los resultados hablan por sí mismos. Atento, quizá seguir el Dry January te saldrá a cuenta.
Estas son los números de la medida ‘Enero seco’: el 88% ahorró dinero, el 70% había mejorado su salud, el 71% durmió mejor, el 67% tenía más energía, el 58% perdió peso, el 80% se siente más en control de su consumo de alcohol, el 57% tenía mejor concentración y el 54% tenía mejor piel, son algunos de los buenos resultados que apreciaron los participantes.
En palabras del psicólogo de la investigación, Richard de Visser, “el simple hecho de tomarse un mes libre de alcohol ayuda a las personas a beber menos a largo plazo: para agosto, las personas reportan un día seco adicional por semana y una copa menos cuando salen”. No hay que olvidarse de los beneficios inmediatos reflejados en una mejora de la salud en general o de que Enero seco ha hecho que los participantes piensen en profundidad sobre su relación con la bebida y aprendan cuándo y por qué beben.
La campaña del gobierno británico Dry January, que propone abstenerse durante 31 días, se realiza desde 2013 y es una copia de una iniciativa del gobierno finlandés, que empezó en 1942. La iniciativa en Reino Unido arrancó para reducir los múltiples problemas con el alcohol y para concienciar de los peligros de consumir demasiado, no tanto por la frecuencia sino también por cantidad.