Una de las razones del crecimiento de los negocios regentados por inmigrantes en Barcelona es la falta de relevo generacional en el comercio tradicional autóctono. Esta es una de las conclusiones de la tesis doctoral que defiende la socióloga, investigadora y experta en inmigración de la Universidad Autónoma de Barcelona, Berta Güell, y que ha servido como base para la conferencia que ha realizado en el Col·legi d'Economistes de Catalunya.
Otra de las conclusiones extraídas del estudio apunta a que uno de los fenómenos que se está produciendo en Barcelona alrededor de los comercios propiedad de inmigrantes procedentes de Pakistán es que poco a poco se están alejando del centro de la ciudad y se están expandiendo hacia las zonas periféricas.
Las razones de este alejamiento hay que buscarlas tanto en la evolución de la economía como en la mayor diversificación y crecimiento de los negocios, que actúan como elemento centrifugador. A esto puede unirse en hecho que desde el Ayuntamiento se ha iniciado una política de restricción en la concesión de nuevas licencias para determinados tipos de negocios en barrios como el Raval para evitar la aglomeración del mismo tipo de tiendas.
Otro de los hechos destacados por la investigadora ha sido que “este tipo de comercios empieza a dar oportunidades de trabajo a las mujeres que proceden de Pakistán, que no pueden acceder a otros puestos de trabajo por la discriminación que sufren”.
DOMINIO MASCULINO
De todas formas, Berta Güell reconoce que la enorme mayoría de los comercios pakistaníes analizados, “todos, excepto dos”, están en manos de hombres, que bien actúan como pequeños comerciantes o como pequeños empresarios. Además, son comercios que suelen potenciar las relaciones familiares, aunque por contra los trabajadores contratados suelen estar en precario, con muchas horas de trabajo por salarios muy bajos, que casi siempre están por debajo del salario mínimo interprofesional.
En cuanto al análisis de la situación geográfica de los comercios, la investigadora ha analizado tres distritos en los que se concentran tanto los negocios como los inmigrantes, el Raval, Gràcia y Besos Maresme. El único en el que los comerciantes suelen habitar en el mismo barrio en el que tienen su negocio es en el Raval, mientras que en Gràcia trabajan pero no viven, y en Besos viven, pero no tienen su negocio.
El estudio también destaca que la mayoría de los comercios propiedad de pakistaníes se dedican bien a la alimentación bien a la telefonía móvil. En el primer caso, sus proveedores suelen ser empresarios locales; en el segundo, la mercancía suele proceder de países como China. Aunque un dato destacable de este tipo de negocios es que en muchas ocasiones actúan más como negocios mayoristas que como venta al detalle. De hecho, muchos de ellos son habituales proveedores de otros comercios tanto a nivel nacional como internacional.
BUSCAR OPORTUNIDADES
La mayoría de los inmigrantes pakistaníes eligen Barcelona como destino final de su viaje por varias razones, según el estudio de Berta Güell, entre las que destaca la tradición de comercio de proximidad de la ciudad, la proyección internacional de la marca Barcelona, la diversidad cultural y étnica y el discurso tradicional de las administraciones locales en defensa de la interculturalidad.
Uno de los cambios más significativos que ha detectado la socióloga ha sido el enorme crecimiento de las franquicias de empresas de supermercado regentadas por pakistaníes. Los motivos hay que buscarlos en su voluntad de occidentalizar su negocio para tener más garantías de obtener beneficios.
Respecto a los métodos de financiación, la mayoría de ellos recurre al dinero de la familia o de los amigos por una simple cuestión de tradición cultural, aunque los hay que por motivos religiosos se niegan a negociar con las entidades financieras.
Berta Güell defiende que la integración de estos inmigrantes ira avanzando conforme vayan llegando la familias que muchos de ellos han dejado en su país y sus hijos empiecen a ir al colegio en la ciudad. Además, el hecho de que poco a poco se vayan expandiendo por otros barrios de los que han sido tradicionalmente los suyos es una señal de que su integración en la sociedad es cada vez mayor. De todas formas, la socióloga ha asegurado que el papel de las administraciones va a ser clave en este proceso ya que este tipo de inmigrantes todavía funcionan muy endogámicamente y es necesaria la adopción de medidas que faciliten su integración.