Una de cada tres mujeres de Barcelona ha sufrido algún episodio de violencia machista muy grave a lo largo de su vida. Esta es una de las principales conclusiones de la Encuesta de Violencia Machista de Catalunya que se dará a conocer en breve y de la que el Ayuntamiento de Barcelona ha avanzado este dato. Sólo en la capital catalana, en el último año, han muerto tres mujeres y un bebé por violencia machista. A estos fallecimientos hay que añadir el de un feto en otro intento de asesinato de una mujer a manos de su pareja.
"La violencia contra las mujeres, y en muchos casos, contra sus hijos, es un problema público de gran envergadura. No sólo es competencia de las administraciones. El conjunto de la sociedad se tiene que corresponsabilizar", dice la concejala de Feminismos y LGTBI del Ayuntamiento, Laura Pérez.
La encuesta fue realizada el año pasado por la Generalitat a mujeres entre 15 y 65 años, y entre lo que se entiende por actos violentos muy graves se incluye violaciones, agresiones físicas violentas, amenazas con represalias, llevarse a los hijos sin permirso y tomar imágenes de carácter sexual, o compartirlas, a menores de 15 años, informan fuentes municipales.
El gobierno de Ada Colau se ha puesto entre ceja y ceja reducir estos crímenes. Este año, el consistorio ha invertido 6,7 millones en políticas públicas contra esta lacra social. La próxima primavera, el Ayuntamiento pondrá en macha una aplicación para que las mujere puedan informar de las agresiones que hayan sufrido en el espacio público. Esto permitirá conocer, de manera continuada y actualizada en tiempo real, qué zonas de la ciudad son más o menos seguras.
También desde el pasado verano, Barcelona dispone de una caseta contra las agresiones sexuales en el paseo marítimo, junto al Hospital de Mar. La ubicación no es gratuita. Esta zona concentra muchos locales de ocio nocturno, como los que hay en el Port Olímpic. La caseta busca hacer labores preventivas, pero también interviene en caso de agresiones.
VIVIENDA Y TRABAJO
Del total del presupuesto municipal, 1,4 millones, van a garantizar el acceso a la vivienda y a la formación ocupacional de víctimas de la violencia machista y de sus hijos. El último año, la ciudad ha contado con 175 plazas residenciales, y en 2018, además, el Patronato Municipal de la Vivienda cederá 10 pisos para estas personas en 10 puntos de la ciudad. 32 mujeres, por otro lado, se han beneficiado de contratos laborales de un año con el objetivo de garantizar su reinserción laboral.
Otra parte de la inversión municipal se la llevan los servicios de atención a mujeres víctimas de violencia machista, entre ellos los PIADS (Punt d'Informació i Atenció a les Dones) y el SARA (Servei d’Atenció, Recuperació i Acollida). En ambos servicios se han incrementado el último año el número de profesionales, hasta 71, que han atendido más de 4.300 mujeres.
El Ayuntamiento también pondrá en marcha una campaña informativa con el lema Davant la violència masclista, no et giris d'esquena, que busca visibilizar esta violencia y concienciar a los ciudadanos. También se realizarán acciones en equipamientos municipales, con menores, para prevenir los abusos sexuales y el maltrato.