La reforma de La Rambla tendrá que esperar. El Gobierno de Ada Colau ha vinculado la remodelación de esta mítica calle a la aprobación de los presupuestos municipales y al impulso de un Plan de Inversión Municipal (PIM). Será entonces cuando el Ejecutivo local presentará un calendario para ejecutar la reforma.
Así lo ha explicado este martes la teniente de alcalde de Urbanismo de Barcelona, Janet Sanz, durante la comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad. "A finales de mandato se realizó un trabajo muy intenso en este proyecto. Pero estamos pendiente de llevarlo al presupuesto y al Plan de Inversión Municipal para poder plantear este calendario", ha indicado Sanz.
PRESIÓN DE JXCAT
La dirigente de los comunes se ha visto obligada a dar explicaciones después de JxCAT haya presentado una proposición en la que pide al gobierno sociocomún consensuar con restauradores, comerciantes y vecinos la reforma de La Rambla. El pasado viernes, los exconvergentes avisaron que el proyecto, "esencial" para Ciutat Vella, lleva "demasiado tiempo" parado.
La proposición del partido dirigido por Elsa Artadi ha contado con los votos a favor de JxCAT, Cs, PP y BCN Canvi, la abstención de ERC y el rechazo de BComú y PSC. Pese a votar en contra, Sanz ha matizado que el Gobierno municipal quiere estar en contacto con todos los afectados por la reforma.
Según ella, el objetivo que se ha marcado el Ayuntamiento con la remodelación de La Rambla es "mantener la coherencia con un proyecto que priorice la vida en el interior de La Rambla y en su relación con los barrios del entorno". Asimismo, ha recordado que el proceso participativo con los vecinos terminó este 2019.