El Centro Cívico La Teixonera, visto desde el exterior / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

El Centro Cívico La Teixonera, visto desde el exterior / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

Horta - Guinardó

La Teixonera: un contrato millonario que sólo tiene un 'novio'

La empresa QSL Serveis Culturals se lleva una licitación de 1,5 millones en la que no tuvo ningún rival

1 febrero, 2021 00:00

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El Centro Cívico La Teixonera continuará en las mismas manos gestoras que hasta ahora. El Ayuntamiento de Barcelona adjudicó el pasado mes de diciembre su gestión a la empresa QSL Serveis Culturals, que cobrará por ello 770.844 euros. En realidad, QSL Serveis Culturals ya había llevado la gestión los últimos años. De momento, el contrato estará en vigor hasta el 31 de diciembre del 2022, pero podrá ser renovado por un par de años más, por lo que el coste total de ese contrato alcanzaría alrededor de 1,5 millones de euros.

La dirección de Servicios a las Personas y al Territorio de Horta-Guinardó emitió un informe justificativo de esta licitación en el que señala que la sede del Distrito necesita a los centros cívicos para hacer políticas de proximidad. “Los centros cívicos organizan actividades de formación, programan ciclos culturales y de las diferentes artes plásticas y llevan a cabo servicios de apoyo a las entidades que incluyen la cesión de espacios e infraestructuras”, dice el citado informe.

La sala de actos del Centro Cívico La Teixonera, en una imagen de archivo / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

La sala de actos del Centro Cívico La Teixonera, en una imagen de archivo / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA


ATENTOS A LA BATUTA DEL AYUNTAMIENTO

Añade el documento que, al mismo tiempo, los centros “han de estar atentos a las nuevas líneas y medidas del Ayuntamiento de Barcelona, como la Medida de Gobierno (sic) Cap a una política pública de cultura i educació, la cual comporta un paradigma diferenciado que ha de articular las relaciones entre cultura y educación a lo largo del ciclo de vida del vecindario del barrio de La Teixonera, del distrito y de la ciudad”.

Así, QSL Serveis Culturals tiene que desarrollar “actuaciones que fomenten la práctica sociocultural del conjunto de la población, posibilitar el acceso y estimular el consumo de bienes sociales y artísticos, así como desarrollar proyectos de apoyo a la creación cultural”. Con estos mimbres, entre sus deberes estarán “dinamizar y extender entre la ciudadanía el debate sobre la cultura, los avances de la ciencia, las corrientes de pensamiento contemporáneo y estar permanentemente atentos a la actualidad de la ciudad y del mundo”.

El Centro Cívico cuenta también con una sala de danza con vistas a La Teixonera / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

El Centro Cívico cuenta también con una sala de danza con vistas a La Teixonera / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA


75 TALLERES AL AÑO

El Ayuntamiento reclama también que se estimule desde el centro “la creatividad y la innovación, hacer emerger el talento y las iniciativas individuales y colectivas de la ciudadanía”. Paralelamente, debe potenciar el surgimiento “de productos e iniciativas de calidad desde el propio territorio” y colaborar en la cohesión social del mismo. Queda claro en las cláusulas del contrato que los servicios prestados han de ser conformes a los modelos de indicadores proporcionados por el Distrito y el Institut de Cultura de Barcelona (Icub). Además, subraya que el proyecto cultural de La Teixonera ha de recoger las acciones de cultura y educación emanadas de la cúpula municipal.

La cartera de servicios incluye un completo “servicio de actividades formativas (cursos, talleres y seminarios)” a lo largo de los próximos dos años. Cada año, se realizarán un mínimo de 75 talleres. También se gestionará la programación estable de espectáculos, ya sea de música, teatro, danza o artes escénicas. Una producción singular será un ciclo específico de danza, que compartirá con otros casales y que prevé la presentación de espectáculos de artistas de danza contemporánea y clásica, así como danzas urbanas (hip-hop, popping, breaking, entre otras). Al mismo tiempo, se prevén charlas “de interés socio-comunitario”, jornadas tecnológicas, conciertos de verano o salidas culturales. En total, se deben programar al menos 15 espectáculos al año de diferentes sectores temáticos: música, visitas culturales, cine y documentales, espectáculos infantiles y nuevos formatos, así como actividades para gente mayor.

Otro ámbito en el que debe trabajar la adjudicataria es en el del servicio de exposiciones: habrán de organizarse un mínimo de 10 anuales. Por otro lado, deberá promover un mínimo de cinco debates o conferencias al año. “El adjudicatario hará una propuesta de seminarios, debates y conferencias que responda al interés de la población y acoja las iniciativas provenientes de la red de centros cívicos y del Distrito”.

Sala de trabajo y ordenadores del Centro Cívico La Teixonera / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

Sala de trabajo y ordenadores del Centro Cívico La Teixonera / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA


UN SOLO LICITANTE

Curiosamente, a la licitación de este concurso sólo acudió QSL Serveis Culturales, que es una de las más mimadas por los responsables municipales: además de gestionar una decena de centros cívicos (entre ellos los del Carmel, Sarrià, l’Alzina, Montcada i Reixac y Casa Groga), lleva las riendas de una quincena de espacios públicos. Esta empresa también gestionó la sala de lectura del Institut Barri Besòs y llevó el apoyo técnico y la gestión del Consell d’Innovació Pedagógica, que depende del Institut Municipal d’Educació de Barcelona.

En la actualidad, tiene en vigor un contrato millonario para fomentar la interculturalidad en Barcelona, que vence este año. No obstante, podría ser prorrogado por otros dos años, por lo que el coste de ese contrato se dispararía hasta los 3,6 millones de euros. Este contrato prevé consolidar la Red BCN Antirumores, cuyos principales objetivos son “desmontar y parar los rumores y estereotipos que afectan a la convivencia y prevenir la propagación de estereotipos, prejuicios y actitudes discriminatorias”.