Como todos los años, el Mobile World Congress (MWC) trae a Barcelona las últimas tendencias en materia de telecomunicaciones, proveedores de tecnología y soluciones digitales. Generalmente, cada edición ha agrupado en una cifra (5) el número de dichas tendencias. Se ha aceptado así a fin y efecto de no perderse en la vorágine del macroevento, en el que hay tantas novedades que uno se atasca en el sinfín de datos, hasta el punto de perder de vista qué es lo que va a marcar la línea durante el año en curso.
Por ejemplo, en 2017, esas cinco tendencias fueron las siguientes: M-Commerce (compras y ventas mediante smartphones), Asistente personal (los móviles no son sólo teléfonos, sino oficinas portátiles), Realidad aumentada (¿se acuerdan de 'Pokemon GO'?), Vídeo en streaming (eventos en directo como maketing digital), y SoLoMo: combinación de las palabras Social, Local y Móvil.
Estamos en 2018, así que hay otras 5 tendencias dispuestas a ocupar el lugar de las que lo fueron hace apenas un año. Así de rápido va el mundo de la tecnología relacionada con el fenómeno de la telefonía móvil. Esta vez, según las empresas expertas, las palabras claves que van a dejarse oír en Barcelona (y no por este orden) serán: Inteligencia Artificial, Asistencia Digital, Realidad Aumentada y Virtual, Comercio Digital e Industry X.O.
Como los especialistas utilizan términos muy complejos, hemos pensado que para facilitar la interpretación al lector podíamos utilizar títulos de películas famosas en las que, de alguna manera, pudiera reflejarse cada una de esas cinco tendencias. Cuatro de las cinco son de ciencia ficción y la última, aunque se trata de una biografía, también podría serlo... por tratarse de quien se trata.
Veamos en qué consisten y qué aportan cada una de ellas:
1.- Inteligencia Artificial (IA): En 2001, Steven Spielberg hizo una película tan rara que pareció inverosímil, pero que ahora es más comprensible. Se llamaba I.A., acrónimo en inglés de Artificial Intelligence. Estamos en 2018 y lo que entonces parecía inverosímil ya se está aplicando en una amplia gama de interacciones con diversas formas de tecnología. Los principales proveedores están construyendo rápidamente herramientas productivas y listas para usar, y con casos de negocio de gran valor económico. En ciberseguridad, por ejemplo, un nuevo nivel de IA puede ayudar a los humanos a anticipar o prevenir ataques.
2.- Asistente Digital (AD): Aquí nos vamos más lejos, hasta 1968. Ese año, el genio Stanley Kubrick dio el gran bombazo con su adaptación de la novela 2001. Una odisea espacial, que había escrito Arthur C. Clarke. En la cinta, una supercomputadora llamada Hall 9000 (acrónimo en inglés de Computador algorítmico programado heurísticamente) controla la nave hablando e interactuando bajo las órdenes de voz que le dicta el astronauta Dave Bowman... hasta que un día pasa de él, claro. Pues bien, hoy en día eso ya ocurre también. Y es que la voz va camino de convertirse en una interfaz predominante para controlar dispositivos, solicitar información y otros servicios. De hecho, se espera que este año las ventas de asistentes digitales de voz dupliquen las de 2017.
3.- Realidad Aumentada y Virtual (RA y RV): El film escogido es más cercano y muy obvio. Se trata de Avatar, una película épica de 2009, escrita, producida y dirigida por James Cameron. Con el aumento de la RV y la RA para mejorar las experiencias dentro de los juegos, los fabricantes de dispositivos están trabajando para hacer que los avatares sean cada vez mas realistas. Hasta ahora eran anteojos, cascos y dispositivos móviles que podían extender nuestra realidad personal a nuevos espacios. El futuro aventura que no necesitaremos móviles inteligentes, porque las evoluciones de estos dispositivos permitirán anticipar cómo interactuaremos con la tecnología.
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4.- Comercio digital (CD): Para ejemplificar este aspecto, tomemos la película Dunkerke, candidata a los Oscars de este año. La cosa es que el director Christopher Nolan quiso volver a los orígenes y rodar en celuloide de 70mm... pero tuvo que hacerlo también en digital. La razón es que, hoy por hoy, el mercado se ha digitalizado y es ahí donde hay más dólares por ganar. Nolan, como artista, se emperró en el celuloide de gran formato, pero la productora le obligó también a tirar de digital. Esto puede servir de ejemplo para certificar la tendencia del comercio digital, que cada vez le otorga más poder al cliente. Las tecnologías digitales -AI, RV, AR, Internet de las Cosas (IoT) y Analytics- se han unido para hacer que el comercio sea más envolvente y conveniente para los compradores, así como cada vez más sibilino y eficaz para las empresas.
y 5.- Industry X.0. La cuarta revolución industrial se está llevando a cabo a través de las tecnologías digitales, y a ese cambio los profesionales del sector le han puesto el mote de Industria X.0. Se trata del proceso continuo de la industria que transforma sus operaciones centrales, las experiencias de los trabajadores, los clientes y los modelos comerciales con tecnologías digitales. Hemos pasado de la tecnología analógica, mecánica y electrónica a la digital -que empezó a finales de los años 70 del pasado siglo- con la adopción y la proliferación de las computadoras digitales y el mantenimiento de registros digitales, que sigue hasta nuestros días. Para entender esos orígenes y calcular hacia dónde vamos, nada mejor que la biografía dedicada a Steve Jobs, una película de 2015, basada en la vida del cofundador de Apple Inc., dirigida por Danny Boyle y protagonizada por Michael Fassbender. Jobs, un tipo realmente complejo y atormentado, aunque sin duda genial, anticipó entonces lo que ahora nos parece de lo más normal: un teléfono móvil capaz de hacer de todo y de cambiar nuestras vidas, por no hablar de su ordenadores Mac, de sus portátiles o de sus 'tablets'. Siempre en la punta de lanza de una industria que, a día de hoy, controla y domina nuestras vidas... a cambio de convencernos de que tenemos todo el poder al alcance de nuestras manos.