La Cambra de Comerç y el Ayuntamiento de Barcelona se quieren tomar en serio el turismo en la ciudad. Con el fin de posicionar la ciudad como destino turístico sostenible, este lunes han anunciado que impulsarán una nueva estrategia de marketing turístico. Tal como han indicado, está pensada para “hacer frente a los retos del futuro, tanto en ámbito local, como en el contexto global”.
La estrategia, según han detallado, tiene cinco objetivos. Uno es garantizar la sostenibilidad de la destinación sin poner en compromiso las necesidades del territorio y la sociedad. Luego, promover la competitividad asegurando al máximo el retorno social y minimizando los efectos negativos al residente.
BARCELONA, UN DESTINO MÁGICO
También quieren potenciar el efecto multiplicador del turismo en los sectores económicos. Promoverán asimismo la gestión integrada de la destinación, es decir, trabajarán de forma coordinada, siendo coherentes. Por último, tendrán en cuenta las diferentes voces que configuran la destinación. En definitiva, quieren vender la ciudad como un destino decente (y mágico), y no de borrachera.
El presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Miquel Valls, ha afirmado que “el triunfo de Barcelona como una marca turística atractiva es consecuencia de un modelo de gestión pública y privada que se ha mostrado exitoso gracias al esfuerzo y al trabajo conjunto de administraciones, empresas y ciudadanos anónimos”.
LOS RETOS DEL TURISMO NECESITAN RESPUESTA
Por su parte, el director general de Turismo de Barcelona, Joan Torrella, ha hecho un repaso por la evolución turística de la ciudad, desde los Juegos Olímpicos hasta hoy, defendiendo la necesidad de responder a los retos del momento actual. “No podemos seguir imaginando la promoción desvinculada de la gestión, tenemos que sentarnos más en la mesa”, ha zanjado.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, consciente de la situación y de su cuestionada gestión, ha apostado por “los vecinos y las vecinas”, sin olvidar que el turismo “tiene que seguir siendo un sector clave”. Esta iniciativa, que se enmarca en el Plan Estratégico de Turismo 2020, estará en funcionamiento el primer trimestre de 2019, justo antes de las elecciones municipales.
UN BALANCE DEL TURISMO CONTRADICTORIO
La estrategia llega justo días después de que Ayuntamiento y Gremi d'Hotels dieran versiones contradictorias sobre el balance de la temporada. Según el concejal de Turismo, Agustí Colom, los turistas alojados en hoteles en la ciudad de Barcelona entre junio y agosto han aumentado un 4,6 % respecto a los mismos meses del año pasado. Sin embargo, el presidente el Gremi, Jordi Clos, exhibió sus cifras y argumentó una caída del 14 %, sobre todo en el mes de agosto, cuando las ventas se desplomaron hasta un 20 %.