El Ayuntamiento saca pecho con el turismo pese a ofrecer datos contradictorios
El Gobierno de Colau pide evitar "visiones catastrofistas" mientras los hoteleros ya hablan de crisis
4 octubre, 2018 12:15Noticias relacionadas
Ya se sabe que con los datos se pueden hacer maravillas, hasta el punto de que, utilizados de una u otra manera, el resultado ofrecido difiere desde el punto de vista que queramos darle. Es lo que sucede con el turismo en Barcelona durante este verano. Para el Ayuntamiento ha sido bueno, mientras que para los gremios empresariales, demuestran que ha habido frenazo y marcha atrás.
La versión buenista la ha dado este jueves el Gobierno de Ada Colau en boca de su concejal de Turismo, Agustí Colom. Según sus datos, los turistas alojados en hoteles en la ciudad de Barcelona entre junio y agosto han aumentado un 4,6% respecto a los mismos meses del año pasado. “Incremento que también se ha registrado teniendo en cuenta todos los otros tipos de alojamiento”, ha asegurado Colom.
Más datos de Colom: los hoteles recibieron 2,2 millones de turistas y 5,9 millones de pernoctaciones en verano -un 0,6% más que en 2017-, datos que “demuestran la vitalidad del sector”, según el concejal, que ha lanzado un aviso a los críticos: "Cuando se dan visiones catastrofistas, son injustas, porque no se corresponden con la realidad y dan una imagen negativa".
Colom ha destacado que sus datos son del mismísimo Instituto Nacional de Estadística (INE), que cifran en esos 2,2 millones los turistas alojados en hoteles y en 4,6% el incremento. Por su parte, los datos de Turismo de Barcelona, a partir de las del Gremi d'Hotels, señalan un aumento superior, del 6,1%, diferencia que Colom ha asegurado que es habitual y normalmente al alza.
Lo curioso es que, entre tanta cifra optimista, Colom ha reconocido que el modelo turístico basado en un crecimiento indefinido “está agotado", y que éste “debe gestionarse” para distribuir los beneficios y minimizar las externalidades negativas “para hacerlo más compatible con la vida en la ciudad”.
LO QUE DICEN LOS HOTELEROS
En el otro lado de la estadística se alinean los que ven el vaso de agua medio vacía. En concreto, el Gremi d'Hotels cifra en un 14% la reducción de su facturación este verano. Hace unos días, el presidente el Gremi, Jordi Clos, exhibió sus cifras y argumentó, en especial, que dicha facturación cayó sobre todo en agosto, el gran mes estival, cuando las ventas se desplomaron hasta un 20%.
La principal causa para los hoteleros no tiene vuelta de hoja: “la inestabilidad política, fruto del procés de independencia y a los múltiples episodios incívicos de este verano”. En este sentido, los hoteleros no han hecho más que confirmar los “peores augurios” que ya se vaticinaban para la temporada de verano. Es más, lanzaron una advertencia de crisis: “Entramos en un periodo complicado".
BAJADA DE PERNOCTACIONES
De hecho, y abundando en las críticas de los hoteleros, Colom no ha podido por menos que aceptar que las pernoctaciones han bajado un 5,4%, según datos del estudio encargado por el Ayuntamiento y la Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur) a la Universitat Rovira i Virgili. “Estamos analizando los datos de este primer estudio del que disponemos en este ámbito”.
Por lo demás, y contando con que ha habido un aumento del 3,8% en el número de pasajeros del Aeropuerto de Barcelona-El Prat este verano y también entre los cruceristas (llegaron al Puerto de Barcelona más de 997.000), Colom ha informado de que, según datos provisionales del primer semestre de 2018, los turistas aumentaron su gasto medio por persona y noche: 102,5 euros en el primer trimestre y 100,6 en el segundo, cuando el año pasado la cifra media se situaba en 96,3 euros.