Los residentes de la demarcación de Barcelona han realizado menos visitas a los comercios de alimentación y de necesidades básicas desde la declaración del estado de alarma, pero han gastado un 18% más en cada compra.
VAN MENOS Y GASTAN MÁS
Según datos de la Diputación de Barcelona, de los 93 mercados municipales de la zona se ha registrado la misma tendencia: los usuarios visitan menos los establecimientos pero el recibo de la compra ha incrementado debido a los “cambios de hábitos en los usuarios”.
El mismo estudio añade que los clientes ahora también adquieren los productos a través de internet, motivo por el cual los supermercados vuelven a salir beneficiados. En supermercados regionales y de proximidad el gasto por compra ha escalado un 28%. Otros 85 mantienen abiertas las paradas de alimentación, plantas y productos de higiene, mientras que 121 siguen cerrados.
REPUNTE EN LOS SUPERMERCADOS
Grandes superficies, por su parte, han disparado sus ventas tras el encierro y otras muchas del sector se han reinventado para ofrecer a los clientes los productos de primera necesidad. La distribución también ha visto como incrementaban las demandas, ya que parte del consumo de alimentación en hostelería se ha trasladado a los hogares: desde menús a seis euros para los profesionales sanitarios hasta cartas a doce euros para las personas que se encuentran aisladas en sus hogares.
CANAL ONLINE
El canal online ha salido especialmente reforzado ante la crisis del coronavirus, a pesar de que el ecommerce alimentario se ha visto sobrepasado por la elevada demanda de los consumidores. Un estudio de la consultora Nielsen asegura que en las últimas semanas se ha registrado un récord en el crecimiento de dicho canal, que escaló hasta el 80% la semana del 30 de marzo al 5 de abril, superando el 73% de la semana anterior.