El vicepresidente comercial de Seat y consejero delegado de Cupra, Wayne Griffiths, ha sido nombrado nuevo presidente de Seat. Ocupará el cargo a partir del 1 de octubre, según ha acordado este miércoles el consejo de administración de Seat, celebrado en Casa Seat de Barcelona.
Griffiths también continuará como consejero delegado y presidente de Cupra y, de momento, como vicepresidente ejecutivo Comercial de la empresa, mientras que Carsten Isensee se mantendrá como vicepresidente ejecutivo de Finanzas e IT, cargo que ya ocupaba durante su presidencia en funciones de Seat.
Con el nombramiento de Griffiths se cierra un período de interinidad en la cúpula de Seat, que estaba siendo pilotada de manera interina por Carsten Isensee desde la marcha de Luca de Meo hace ocho meses.
DEVOLVER LA RENTABILIDAD PERDIDA
Griffiths ha subrayado que su objetivo es convertir Seat y Cupra en marcas "muy relevantes", emprender el camino de la electrificación y que persigue devolver a la compañía la rentabilidad perdida.
Durante los últimos tres años y hasta la irrupción de la COVID-19, que ha lastrado los números del primer trimestre de 2020, Seat ha sido la marca con mayor crecimiento en Europa, obteniendo en 2019 sus mejores resultados en ventas, producción y beneficios. Esta etapa pasada de éxitos coincidió con la mayor ofensiva de productos.
IMPULSO A SEAT
El pasado julio, la compañía ya anunció un plan de inversión de 5.000 millones de euros entre 2020 y 2025 para llevar a cabo estos proyectos, entre los que destacan el lanzamiento de cinco nuevos modelos eléctricos e híbridos enchufables hasta 2021.
El consejo de administración de Seat también ha nombrado a Herbert Steiner nuevo vicepresidente de Producción y Logística, en sustitución de Christian Vollmer, mientras que Luis Comas ha dejado su cargo de vicepresidente de Servicios Legales y Buen Gobierno y pasa a ser miembro independiente del consejo.