Oriol de Pablo, el cofundador de Vicio que hundió una startup y al que persiguen inversores

Uno de los restaurantes que ha saltado a la fama en las últimas semanas ha sido Vicio. En un inicio se presentó como un restaurante 100% online, pero rápidamente se desvirtuó y abrió locales físicos. El primero lo situaron en el upper Diagonal, en el número 21 de la vía Augusta de Barcelona. Más tarde, inauguraron un espacio gastronómico en Mas Sorrer (Girona), uno de los spots de moda entre los jóvenes catalanes de clase alta. 

Con un marketing digital excelente, Vicio ha conseguido que todos quieran probar sus hamburguesas. ¿Pero quién se encuentra detrás de esta empresa? La cara visible de la marca es Aleix Puig, ganador de la séptima edición del concurso televisivo MasterChef. Detrás de él está Oriol de Pablo, un empresario cuya anterior aventura en una startup acabó de la peor forma posible.

Interior del restaurante Vicio de Barcelona / MA

EL FIASCO DE ORIOL DE PABLO

De Pablo era el CEO y Co-fundador de Joyners, una app que ponía en contacto a cuidadores con personas de la tercera edad para ofercerles sus servicios. La startup acabó en concurso de acreedores. Ahora, el consejo de accionistas de Joyners se plantea emprender acciones legales contra Oriol de Pablo por su mala gestión, según ha podido saber Metrópoli. 

Y es que la idea de negocio de Joyners sedujo a muchos inversores de Barcelona, que depositaron su capital en la startup. Confiaron en Oriol de Pablo, quien se puso al frente de la compañía. Pasados siete años, la empresa no trajo los resultados esperados. Por el camino, algunos inversores se sintieron engañados, y acusaron al ahora creador de Vicio de manipular las cuentas de Joyners. Además, su relación sentimental con la cofundadora y su posterior ruptura complicaron todavía más los "líos accionariales de Joyners", indica una fuente próxima a De Pablo.

VICIO, ¿MODA PASAJERA O UN CASO DE ÉXITO?

Además, los antiguos socios de Oriol de Pablo sospechan que estaba inmerso en la creación de Vicio cuando Joyners aún no estaba quebrado. Le afean su escasa implicación en un proyecto del que todos esperaban un éxito empresarial.

Ahora, Oriol de Pablo se dedica en cuerpo y alma a Vicio, empresa de la que es Co-fundador. Desde la lejanía, sus antiguos compañeros de inversión lo observan con recelos, pendientes de cómo acaba esta nueva aventura empresarial. De momento, ha seducido a los foodies de la ciudad con un marketing impecable. La calidad se juzgará más adelante, cuando la moda acabe y se valore el producto.