Los restaurantes españoles de Hard Rock Cafe constituyen un pozo sin fondo de números rojos. Se parecen a una máquina de perder dinero a espuertas.
Sus problemas no son achacables al Covid, pues ya lleva cinco ejercicios consecutivos deficitarios, tal como muestra la tabla adjunta. Pero la pandemia los ha acrecentado, igual que ocurre con la mayoría de los negocios hosteleros.
Año | Ventas | Resultado |
2020 | 5,1 | -8,4 |
2019 | 28,7 | -9,2 |
2018 | 29 | -2,1 |
2017 | 30 | -3,6 |
2016 | 28 | -1,7 |
ESTADO DE ALARMA
La compañía, oriunda de Estados Unidos, tiene su sede central y las oficinas españolas en la barcelonesa plaza de Cataluña número 21. En este céntrico enclave explota, además, uno de sus tres negocios de la península.
Los otros dos se encuentran en Madrid y Sevilla. Cuando sobrevino el coronavirus, Hard Rock se vio forzada a cerrar sus hamburgueserías en el periodo marzo-junio.
DESPLOME DE LOS INGRESOS
Además, presentó expedientes de regulación para 348 empleados, casi el 100% de la plantilla. Los meses de clausura total solo permanecieron en activo dos trabajadores.
El cese de actividades temporal y las restricciones de aforo posteriores se tradujeron en una desoladora caída de las ventas en un 82%, puesto que pasaron de 28,7 a 5,1 millones.
DESCALABRO
Los resultados fueron catastróficos. Las pérdidas antes del impuesto de sociedades subieron de 8,7 a 9,7 millones. Es decir, en Hard Rock España se dio el insólito caso de que los números rojos rebasaron largamente la cifra de ingresos, hasta prácticamente doblarla. Por cada euro facturado, perdió casi dos.
El agujero ha comprimido drásticamente el patrimonio de la compañía y lo reduce a solo 1,5 millones, cuando a comienzos de 2020 contabilizaba 10 millones.
DIVIDENDOS
La multinacional americana, nacida en Florida, emplea dos procedimientos para succionar la pasta de su filial ibérica. Uno es el dividendo.
Dada la persistente situación deficitaria, en el último quinquenio solo se repartió en 2017, con cargo a reservas, por importe de 600.000 euros.
EL CHOLLO DE LOS “ROYALTYS”
Otro son los “royaltys” anuales que devenga por prestar la marca. En este caso se trata de un ingreso recurrente, pues no falla nunca. Hard Rock España está obligada por contrato a satisfacer a su matriz un canon anual del 5% de las ventas del restaurante y del 10% de las tiendas existentes en cada local.
Dado el escaso negocio de 2020, solo abonó por tales conceptos la suma de 185.000 euros, equivalentes a la décima parte de la cantidad que libró en 2019.
RESPALDO
Aunque Hard Rock España acumula un lustro de resultados negativos, ha confeccionado sus cuentas bajo el principio de empresa en funcionamiento, dado que prevé una mejora sustancial de la actividad y además cuenta con el respaldo pleno de su potente accionista de EEUU.