El Consorci Turisme de Barcelona funciona en la capital catalana desde 1993. Este ente, impulsado por el Ayuntamiento, la Cambra de Comerç y la Fundació Barcelona Comerç, trabaja para la promoción de la actividad turística en la ciudad tras aprovechar la inercia de los Juegos Olímpicos.

Entre los empleados que han trabajado para el consorcio, se encuentran los informadores-traductores, una figura reclamada por la Generalitat y el Ayuntamiento que dio servicio en comisarías policiales de la ciudad a través de una empresa externa. Pese a trabajar en las comisarías, eran empleados externos de Turisme de Barcelona.

Los trabajadores dispusieron de un convenio de prórrogas hasta 2019, cuando se decidió poner fin a la actividad de estos empleados. Algunos de ellos fueron despedidos, lo que se tradujo en un seguido de demandas cuyo coste fue sufragado el pasado año.

DESPIDOS

Los trabajadores que fueron despedidos formaban parte de la empresa de externalización Suport Pol Mark, perteneciente a TQ Serveis. Todos ellos desempeñaban su cargo en las comisarías de Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana de la calle de Nou de la Rambla y de la Rambla respectivamente.

Instalaciones de Turisme de Barcelona / CATALUNYA.COM

Las Cuentas Generales del Ayuntamiento en 2021 reflejan diversos despidos y el coste de las facturas pagadas al abogado laboralista Victor Codina por trabajos de asesoramiento en cuestiones laborales. El precio ascendió a 9.558,80 euros para los casos de seis trabajadoras, a lo que se añadieron otros 1.944,77 euros en concepto de elaboración de cartas de despidos.

A estos costes se sumó el relativo a asesoramientos en casos de prejubilaciones, que se situó en 25.337,64 euros más, por lo que los costes totales se establecieron en 36.841,21 euros. Según fuentes de Turisme de Barcelona, 19 empleados se acogieron a las prejubilaciones.

INDEMNIZACIONES

Los trabajadores afectados por estos procesos, como indican las mismas fuentes, ejercieron en la comisaría de Mossos hasta diciembre de 2018 y en la de la policía barcelonesa hasta junio de 2019.

A raíz de los despidos, diversos trabajadores optaron por demandar a la empresa externalizada que ofrecía el servicio a Turisme, TQ Serveis, así como al propio entre y al Ayuntamiento de Barcelona.

Trabajadores de Barcelona Turisme en una oficina / TURISME DE BARCELONA

Tras la celebración de comparecencias y juicios, en algunos casos se produjeron condenas indemnizatorias. Los costes de éstas fueron asumidos por la adjudicataria, TQ Serveis, por lo que el consistorio y Turisme solo afrontaron los gastos jurídicos.

SERVICIOS DE EXTERNALIZACIÓN

La compañía TQ Serveis, a la que se externalizó el servicio de informadores-traductores, es una compañía afincada en Barcelona y operativa desde los años 70 especializada en este tipo de servicios.

La empresa ofrece trabajadores en los ámbitos de logística, industrial y hostelería, además de disponer de azafatas y personal especializado en manipulados técnicos y digitalización de documentos.

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