Los hoteleros temen una caída de la ocupación si no pueden usar las piscinas. El presidente del Gremi d'Hotels de Barcelona, Jordi Clos, cree que, a raíz de la declaración de la fase de emergencia por la sequía, puede producirse una "importante caída de la ocupación".

Tras la preocupación del sector se encuentra que, debido a las restricciones, los establecimientos pueden verse obligados a cerrar las piscinas. Y es que entre las medidas se incluye la prohibición de llenar total o parcialmente todo tipo de piscinas con agua dulce, lo que incluye las de los hoteles y campings.

RESTRICCIONES

La alarmante situación por la falta de agua incluye numerosas restricciones que afectan a toda Catalunya. Entre ellas y, quizá, la más destacable, se encuentra la limitación del consumo por persona y día, así como otras que afectan a los sectores agrícola e industrial.

Mujer nadando en una piscina PIXABAY

No obstante, para los hoteleros, las piscinas se han convertido en un complemento "bastante básico" para hacer frente al calor que hace en verano. Por ello, Clos considera que es posible que los turistas se decanten por otros destinos. "Nos encontraremos con una situación de crisis de sequía y otra de crisis económica", analiza.

CONSUMO EN HOTELES

Preguntado por la posibilidad de llenar las piscinas con agua de mar, ha señalado que es complicado y que muchos establecimientos ya han cambiado el sistema de depuración de las piscinas, lo que no supone pérdida de agua, y que otros hoteles también lo van a hacer, porque "no estamos ante un problema puntual".

Por otra parte, el gremio hotelero explica que presentó el año pasado un informe en el que se apuntaba que los establecimientos de la ciudad han reducido un 40 % el consumo de agua en los últimos siete años y que de media se consume 163,5 litros de agua por día y cliente, por debajo de los 200 litros decretados como consumo máximo.

MEDIDAS EN ESTABLECIMIENTOS

Clos también ha asegurado que los hoteles han mejorado su gestión del agua con medidas como adecuar las instalaciones para el reciclaje de aguas grises; mediante la instalación de sistemas de grifos, duchas y WC con ahorro de agua, de sistemas de monitorización diario del consumo de energía y agua o con piscinas con sistemas de recirculación de agua.

Asimismo, ha recordado que en los últimos años se han eliminado el 30% de las bañeras de los establecimientos y se han sustituido por duchas, lo que supone un consumo más eficiente.

Los hoteles de Barcelona, además, llevan tiempo haciendo campañas de concienciación sobre el uso del agua más eficiente para sus clientes, entre cuyas recomendaciones está la de utilizar las toallas de la ducha más de una vez.