Las macropanaderías crecen en los barrios por la ‘saturación’ del Eixample: Barcelona roza el millar

La presencia de las macropanaderías se dispara en Barcelona. La rápida capacidad de expansión de este tipo de cadenas, con prácticamente nuevas aperturas cada día, ha llenado las calles del centro de la capital catalana. En su plan de expansión, ahora la tendencia se dispersa por los barrios periféricos de la urbe.

Así lo demuestran los últimos datos recopilados por el Gremi de Restauració y compartidos a Metrópoli. La ciudad se acerca al millar de establecimientos. A fecha de noviembre de este año, son 883 locales los que han abierto en la ciudad.

Los economistas alertan sobre la fiebre de las macropanaderías en Barcelona: un sector "subvencionado" que "no aporta riqueza"

Se trata de un gran crecimiento. En marzo de 2024, según datos municipales, había un total de 755 establecimientos pertenecientes a cualquiera de las muchas cadenas de esta índole. En algo más de un año y medio, han abierto 128 nuevos locales.

En todos ellos venden pan, café, bollería variada, bocadillos e incluso en algunos de ellos hay menú para comer. Es un híbrido entre un bar, una cafetería, un restaurante y una panadería.

Mostrador de uno de los muchos Vivari que tiene la ciudad de Barcelona Vivari

El Ayuntamiento diferencia, en este sentido, entre tres categorías: los que ejercen de panaderías con servicio de degustación, los que también tienen licencia de restauración y los que solo hacen de panadería y restauración. Con 212 locales --en cómputo--, se lleva la palma el distrito del Eixample, que supera por mucho a cualquier otra zona de la ciudad.

Del centro a la periferia

Pero el céntrico distrito solo ha sumado en el último año y medio 15 nuevas aperturas, una cifra que queda lejos de las 25 y de las 23 que han tenido lugar en los distritos de Sants-Montjuïc y Nou Barris, respectivamente. Son las demarcaciones que más aperturas aglutinan, lo que demuestra una clara tendencia a la expansión desde el centro hacia los distritos más periféricos.

La nueva macropanadería de Santa Gloria en Barcelona Cedida a Metrópoli

Sants-Montjuïc tiene, en total, 110 macropanaderías abiertas en la actualidad, mientras que Nou Barris suma 82 en todo el distrito.

Sustitución del comercio tradicional

En conversación con este medio, varios economistas han alertado del perjuicio que supone este modelo de negocio que sustituye otros comercios, bares y restaurantes en la capital catalana. Modest Guinjoan, por ejemplo, destaca que hay una sustitución en el paisaje urbano, que se debe en buena medida a la falta de relevo generacional y a la poca rentabilidad de los negocios.

Y, si bien el también profesor de la Universitat de Barcelona (UB), Gonzalo Bernardos, destacaba que era una primera oportunidad laboral para trabajadores de origen migrante, el también economista Miquel Puig destacaba que es un sector que, por sus bajos salarios generalizados, supone una carga al erario público en la contribución tributaria.

Un Vivari ubicado en el Eixample de Barcelona Òscar Gil Coy Barcelona

En cualquier caso, los tres expertos analizan que, en términos generales, es un sector que rellena los huecos que otros comercios dejaron al bajar persianas, pero que no contribuyen a la generación de riqueza.

Un nuevo convenio

Un dato, empero, que podría cambiar con la firma del convenio pactado entre la patronal de hostelería de Catalunya y el sindicato UGT. El nuevo acuerdo, que todavía está por entrar en vigor, ampara a todos los trabajadores de todos los locales en los que se sirva comida o bebida, ya sea para llevar o para consumo en interior o terraza.

Con este cambio, además de mejoras en materia de permisos, vacaciones, jornada laboral o libranzas, los salarios aumentarán, según cálculos sindicales, entre 300 y 400 euros mensuales de manera generalizada.