Tercat, el gigante chino que se forra en los muelles de Barcelona

Terminal Catalunya SA (Tercat) se ha transformado en una máquina de repartir dividendos a su dueño único, el grupo Hutchison. Este gigante es originario del enclave chino de Hong Kong.

En 2006 adquirió el 100% de Tercat a la familia barcelonesa Mestre Fernández por 250 millones contantes y sonantes. Y la flamante filial ibérica pasó a utilizar la marca Hutchison Ports Best.

Desde entonces, los orientales se han dedicado a regentar su negocio de servicios a los barcos portacontenedores, pero a la vez se han aplicado a fondo a recuperar la enorme inversión realizada en los muelles de Barcelona.

DIVIDENDOS A DESTAJO

Uno de los procedimientos más directos para succionar recursos es el dividendo. En el periodo 2017-2020, Hutchison se ha embolsado 111 millones por dicho concepto.

En esos cuatro ejercicios, Tercat arrojó ganancias de 85 millones. Por ello, para cubrir la diferencia echó mano de las reservas sociales acumuladas.

INGRESOS DESCENDENTES

La actividad del consorcio en 2020 fue declinante debido a los problemas de todo orden ocasionados por la pandemia. La cifra de negocio bajó de 151 a 143 millones y las ganancias finales, de 22 a 21 millones.

Panorámica en la que se distingue el puerto de contenedores

DISPENDIOS

Tercat está dotada de unos recursos propios de 126 millones. Los activos alcanzan la respetable suma de 455 millones. Equivalen sobre poco más o menos a las inversiones realizadas por la compañía en su fondeadero, cifradas en 440 millones.

CONCESIÓN PÚBLICA

Las instalaciones que posee en la dársena Prat abarcan 100 hectáreas. Tercat logró la concesión durante 30 años en 2006, cuando estaba dirigida por la saga Mestre. Posteriormente consiguió que la Autoridad Portuaria la extendiese 15 años más.

La compañía ha pactado con ella agregar a sus dominios actuales otras 38 hectáreas de terreno, que incluyen 600 metros adicionales de línea de atraque.

UTILLAJE

Grupo Tercat presta a los buques que arriban a Barcelona servicios de estiba, desestiba, carga, descarga y trasiego de contenedores. Su maquinaria comprende 13 grandes grúas, que permiten asistir a los barcos de mayor tamaño existentes en el mercado.

Tercat cuenta con 200 empleados. El consejo de administración está formado por delegados de la multinacional china, salvo un español, el consejero Guillermo Belcastro Rodríguez.

Trabajador en la terminal Tercat

EL PELOTAZO DE TCB

Tercat compite en el puerto de la Ciudad Condal con el otro gran concesionario Grup Marítim TCB. Los dueños de éste, encabezados por la familia santanderina Pérez Maura, lo traspasaron en 2015 al coloso danés Maersk, líder mundial del transporte de mercancías por mar. La cifra que se embolsó la estirpe Pérez Maura nunca se ha revelado, pero se estima en varios millardos de euros.

TCB posee terminales también en Valencia, Castellón, Gijón e Islas Canarias. Fuera de España gestiona instalaciones en Turquía, Guatemala, México, Colombia y Brasil.