El gobierno de Ada Colau ha gastado 8,3 millones de euros en la compra de una finca situada en la calle de Balmes 16, en el corazón del Eixample. Se trata de un edificio residencial con 23 viviendas entre 40 y 130 metros cuadrados, han confirmado fuentes municipales.
El Ayuntamiento compra, cada vez más, inmuebles para ampliar el parque de pisos públicos de la ciudad. La citada operación se ha llevado a cabo mediante el derecho de tanteo y retracto que tienen las administraciones públicas.
Del total, una docena están vacías y el resto (11) ya están alquiladas. En los bajos del edificio de Balmes 16, situado entre la Gran Via y la ronda de la Universitat, también hay un restaurante, el Centfocs, que no acaba el contrato de alquiler hasta dentro de 10 años.
MÁS DE NUEVE MILLONES, SEGÚN IDEALISTA
La adquisición ha sido avanzada por Idealista, que cifra en más de 4.000 euros el metro cuadrado en la zona, y confirmada por Metrópoli. El portal subraya que el montante ascenderá a más de nueve millones de euros con la rehabilitación. El Ayuntamiento no ha confirmado la citada cantidad a este medio ni cuándo pueden estar listas las casas para incorporarse al parque público de la ciudad si ese es el objetivo. Fuentes municipales dicen que todavía es pronto para concretar la rehabilitación y los plazos.
La compra del edificio en la calle de Balmes es notablemente más cara que otras operaciones similares del Ayuntamiento en otros barrios de la ciudad. Por ejemplo, el pasado febrero, el gobierno de Colau se hizo con tres edificios en Horta por 1,4 millones de euros. En las fincas vivían 45 familias y se esperaba que de la reforma –con un coste de de 4,5 millones– salieran 36 viviendas. Y a finales de 2019, el consistorio se hizo con un inmueble con 13 pisos y dos locales comerciales en Sants por 2,2 millones.
900 VIVIENDAS EN DOS MANDATOS
Fuentes del sector inmobiliario citadas por Idealista tildan la compra de "insensata" por el alto coste, a más de 4.000 euros el metro cuadrado, defienden como operaciones más viables otras localizaciones y cuestionan la adquisición si el Ayuntamiento dispone de terrenos o edificios por reformar. Normalmente, el gobierno informa de estas compras a través de una nota de prensa, pero en esta ocasión no se ha hecho. El silencio se ha impuesto.
Hasta el pasado febrero, el Ayuntamiento ha comprado más de 900 viviendas entre el mandato pasado y el actual que ha supuesto una inversión acumulada de más de 70 millones de euros. Estas adquisiciones también tienen como objetivo parar procesos de especulación inmobiliaria que podían acabar en la expulsión de vecinos [ver aquí la nota de prensa municipal].