La librería Finestres se expande en Barcelona. Un año después de su apertura en el número 249 de la calle Diputació, el negocio abrirá un nuevo establecimiento justo enfrente de la librería original

El primer local de Finestres se encuentra en uno de los edificios emblemáticos de Enric Sagnier, propiedad de Sergio Ferrer-Salat, fundador del negocio. La nueva librería, en el número 250, también estará en un edificio de Sagnier: la Casa Garriga Nogués, catalogada en 1980 como Bien de Interés Cultural. 

ESPECIALIZADA EN LIBROS DE ARTE

Al anunciar la apertura de Finestres, inaugurada el pasado 15 de abril, avanzaron que en otoño de 2021 abrirían un segundo local especializado en libros de arte, un espacio donde "confluyan las distintas disciplinas artísticas y visuales", según informa la empresa. 

No obstante, la puesta en marcha del establecimiento se retrasó y este marzo ultima los detalles para subir la persiana. Se trata de un espacio de 200 metros cuadrados de superficie con una decoración exclusiva que concuerda con el índole artístico del nuevo negocio. Llama la atención, sobre todo, por las pirámides invertidas de vidrio que protagonizan la estética de la nueva apuesta de Finestres. 

Decoración de la segunda librería de Finestres / METRÓPOLI

MONVÍNIC 

La librería Finestres relevó al restaurante Monvínic, también propiedad de Sergio Ferrer-Salat. El negocio gastronómico registró perdidas incesantes pese a su reputación en el mundo de la vinicultura. Por ello, Ferrer-Salat cambió la hostelería por la cultura con el objetivo de abrir un nuevo concepto de librería que, por el momento, tiene bastante éxito entre los barceloneses.

No obstante, la tienda de vinos artesanales Monvínic, que se encuentra junto a la primera librería –en el número 251 de la calle de la Diputació–, sí que continúa abierta como referencia vinícola en la capital catalana.  

Variedad de vinos de Monvínic / ARCHIVO

CONCEPTO DE FINESTRES

La primera librería tiene 600 metros cuadrados de superficie y llama la atención por la chimenea virtual que tiene en su interior y por su peculiar ambiente de aire inglés. Además, prácticamente no tiene cobertura –ni enchufes– para que la conexión a internet no perturbe la lectura. 

Nació para ser un espacio para lectores y va mucho más allá de la compra de libros. Con sofás, suelos de madera y mucho silencio se convierte en un lugar evasivo para leer en el corazón de Barcelona. El nuevo espacio, por su parte, se centrará en el cómic, la ilustración, la arquitectura, el urbanismo, la fotografía, la música, el cine, la danza, el diseño e incluso la moda.

Librería original de Finestres / FINESTRES

PROYECTO CULTURAL

La librería tiene una programación muy activa durante todo el año, organizada por un equipo con una larga trayectoria del sector: Àurea Perelló, Mireya Valencia, Camila Enrich, Marina Espasa y Kiko Amat.

Además de contar con 35.000 referencias –un tercio de las cuales son libros en otros idiomas–, el local acoge charlas, eventos y firmas de libros de reconocidos autores. 

Fotomontaje de Sergio Ferrer-Salat frente a la sede de Laboratorios Ferrer / FOTOMONTAJE METRÓPOLI

SERGIO FERRER-SALAT

Sergio Ferrer-Salat es hijo de Carlos Ferrer-Salat, expresidente del Comité Olímpico Español y fundador de los Laboratorios Ferrer SA en 1950 –junto a un primo suyo–, empresa de la cual Sergio es actualmente el único dueño. 

Es uno de los empresarios más ricos de Barcelona gracias, principalmente, a los ingresos de los laboratorios, uno de los negocios farmacéuticos más importantes de España

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