Una tercera sentencia ha tumbado otro eje verde de la Superilla de Consell de Cent en Barcelona, el que corresponde a la calle perpendicular de Rocafort. La juez ha considerado que no se podía tramitar como una obra ordinaria sino que, para peatonalizar una calle debía modificarse el Plan General Metropolitano (PGM).



La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, da la razón a la Unió d'Eixos Comercials Turístics de Barcelona (Barcelona Oberta), que había presentado recursos contra la peatonalización de la Superilla de Consell de Cent que emprendió Ada Colau cuando era alcaldesa de la ciudad.

Tercera sentencia contra los ejes verdes de Colau

Una primera sentencia en septiembre de 2023 ya dictaminó que se tenía que revertir la peatonalización de Consell de Cent. Un segundo fallo, conocido la semana pasada, dictaminó lo mismo para la calle perpendicular de Comte Borrell.  El tercero, de este viernes, 3 de mayo, afecta a la calle Rocafort y la plaza en el cruce con Consell de Cent.

La Superilla fue uno de los proyectos bandera del mandato de Colau y uno de los más polémicos. Consistió en la peatonalización de esta calle del Eixample y de tramos de otras vías perpendiculares, Comte Borrell, Rocafort y Girona, así como cuatro plazas en los cruces de las calles.

Regresar a la planificación anterior

Con los mismos argumentos que el fallo de Consell de Cent y el de Comte Borrell, la magistrada del juzgado de lo Contencioso Administrativo número 10 de Barcelona ha dictaminado revertir el proceso de peatonalización y regresar a la planificación previa de la calle Rocafort.

En todo caso, sobre el papel, la nueva sentencia insta a revocar el proyecto de peatonalización de Rocafort por no ser "ajustada a derecho" y condena al Ayuntamiento "a reponer en su ser y estado, tal y como los define el PGM de 1976, el vial y el cruce afectados por el acto administrativo". Como en los anteriores fallos, el argumento es que, por el calado de las actuaciones, el Ayuntamiento gobernando entonces por Colau debería haberlo tramitado como una modificación del PGM y no como una obra ordinaria.

Calle del Consell de Cent tras su reurbanización LUIS MIGUEL AÑÓN

"Bajo la apariencia de lo que el Ayuntamiento de Barcelona denomina un Proyecto Ejecutivo de obra ordinaria se encubre una actuación urbanística transformadora de la red viaria del Eixample, que por ello hubiera debido eventualmente tramitarse y, en su caso, aprobarse mediante una Modificación Puntual del Plan General Metropolitano", sostiene la juez en la sentencia. Para la magistrada, la Superilla está "lejos" de ser un proyecto de obras ordinario. "Significa un cambio de paradigma respecto a cómo se había concebido hasta ahora la urbanización del espacio público. Implica pasar de calles pensadas para los coches a calles pensadas para las personas, invirtiendo por completo sus prioridades y usos", esgrime.