Otro restaurante icónico del barrio del Eixample que baja la persiana. Esta vez hablamos de Citrus, ubicado en el número 44 del codiciado paseo de Gràcia, esquina con Consell de Cent. El local, que ha estado durante 30 años sirviendo comidas en el centro de Barcelona, abrió por última vez el pasado 23 de febrero al mediodía.
La noticia la dio a conocer el mismo restaurante en sus redes sociales, desde donde agradecieron a sus clientes la confianza depositada durante tantos años: “ha sido un placer compartir tantas sobremesas con vosotros”.
Local alquilado
Por el momento, se desconoce qué abrirá ahora en su lugar, aunque Metrópoli ha podido comprobar que el espacio ya se ha alquilado. Laborde Marcet es la consultora inmobiliaria que se está haciendo cargo de la operación comercial.
Local de paseo de Gràcia alquilado que antes ocupaba el restaurante Citrus
Aunque fuentes internas del restaurante no apuntan a los precios de alquiler de la zona como motivo del cierre, que en este caso atribuyen a un cambio de ciclo, estos oscilan entre los 35.000 y los 50.000 euros, según expertos del sector han detallado a este medio.
El espacio tiene una capacidad de 800 metros cuadrados –con un aforo para atender hasta 230 comensales–, de los cuales 600 pertenecen a la primera planta, que ofrece unas vistas privilegiadas del paseo de Gràcia.
Gestionado por AN Grup
El restaurante especializado en sushi Citrus pertenece a AN Grup, la compañía de restauración barcelonesa controlada por el veterano Artemio Nolla Furriol, que dirige de la mano de su hijo Artemi Nolla Winkel.
El grupo está presente tanto en la capital catalana como en Madrid, donde gestiona otras conocidas marcas como Mussol, La Botiga, Txapela o Tapa Tapa, que se encuentra justo al lado del antiguo Citrus.
La compañía de Nolla comprende una veintena de locales en España, de los cuales 18 se encuentran en Barcelona. El entramado se completa con media docena de establecimientos franquiciados abiertos en el Aeropuerto del Prat.