El Ayuntamiento de Barcelona, a través del gobierno que encabeza la alcaldesa Ada Colau, tendrá prioridad para comprar cualquier finca que se ponga a la venta en las calles de Robador, Sant Ramon y Espalter, en el barrio del Raval. La comisión de gobierno municipal ha aprobado ampliar el derecho de tanteo y retracto del Área de Conservación y Rehabilitación de la zona.
El consistorio ya es propietario de 12 edificios --con unos 150 pisos-- en este punto del Raval y la medida aprobada busca evitar "movimientos especulativos que perjudiquen el derecho fundamental a una vivienda digna y adecuada", según ha explicado en una nota de prensa el Ayuntamientio. En total, el gobierno de Colau tendrá prioridad en la compra de 47 fincas.
PROSTITUCIÓN Y DROGAS
En esta zona del Raval, son habituales los conflictos y la falta de convivencia porque en muchos pisos se ejerce la prostitución o, en ocasiones, se alquilan a turistas de manera ilegal.
Además, en el último año, en muchos puntos del barrio, se ha producido un incremento de la venta de drogas en viviendas y ha aumentado la presencia de toxicómanos y jeringuillas en las calles. Tanto los Mossos como la Guàrdia Urbana han hecho este año distintas operaciones antidroga en el Raval.
A partir de ahora, los propietarios de los edificios que se pongan en venta en esta zona del Raval están obligados a comunicar al Ayuntamiento cualquier operación de compra-venta para que la Administración pueda igualar la oferta y comprar el inmueble.
Si al consistorio no le fuera comunicada la venta de un edificio, el gobierno municipal tendrá derecho a recomprar la finca en cuestión al mismo precio que el fijado en la escritura.
En el caso de que el Ayuntamiento no esté en disposición de adquirir una finca, este instrumento también permite a la Administración tener conocimiento de las compra-ventas de la zona, lo que facilita un seguimiento del inmueble.
La medida también servirá para combatir la degradación en la que se encuentran algunas fincas de la zona y fomentar la rehabilitación.