Ha llegado el día. Miles de niños barceloneses han salido a la calle emocionados para encontrarse cara a cara con sus ídolos: los Reyes Magos de Oriente. Tampoco ha faltado a la cita la alcaldesa Ada Colau que ha recibido con pan y sal a Sus Majestades, como símbolo de hospitalidad, justo cuando desembarcaban en el Moll de la Fusta. En su tradicional discurso ha hecho un llamamiento a ser una ciudad de paz, amor y acogida. Seguidamente, ha entregado la llave de la ciudad para que los Reyes puedan acceder a todas las casas y dejar los regalos.
“Este año han pasado cosas malas en la ciudad, es por eso que más que nunca queremos demostrar al mundo que queremos acoger y decir que aquí todos son bienvenidos”, ha destacado la alcaldesa. A continuación, a querido mencionar que los niños no solo han pedido regalos, sino también muchos deseos. “No queremos guerras ni violencia”, ha exclamado ante el público.
Melchor y Ada Colau han hablado de amor y paz en su discurso / AJUNTAMENT
Los Reyes Magos también han dedicado unas palabras a los pequeños. El rey Melchor, en representación de Gaspar y Baltasar, ha pedido a los niños, en la línea de Colau, que mantengan la paz, la alegría y la bondad para nutrir el corazón y el alma. En este sentido, ha recordado a los pequeños que somos unos afortunados por vivir en libertad, el amor y el afecto de todos los que nos rodean.
Antes de iniciar la cabalgata, los reyes Magos han saludado a aquellos niños que han ido a recibirles al Moll de la Fusta y han recogido algunas cartas de última hora.
600.000 PERSONAS
Entre los asistentes, se comentaba que el rey Melchor se parecía al actor Josep Maria Pou, mientras que Gaspar recordaba a la teniente de alcalde de Barcelona Janet Sanz, sin embargo, no se ha encontrado ninguna similitud a Baltasar.
Después del discurso, los tres Reyes han iniciado la cabalgata acompañados por su tradicional séquito de criaturas mágicas. El recorrido se ha iniciado a las 18.00 horas en la avenida Marquès de l'Argentera y ha acabado pasadas las 21.00 horas en la avenida Francesc Ferrer i Guàrdia, tras pasar por Via Laietana, plaza Catalunya, Ronda Sant Antoni, avenida Paral·lel y plaza Espanya. Han seguido la cabalgata por el centro de la ciudad unas 600.000 personas.