El calor acecha, el tiempo apremia. Los taxistas llevan acampando en la Gran Via de les Corts Catalanes desde el pasado viernes para conseguir que se cumpla la ratio de una licencia VTC por cada 30 de taxi.

Se nota el cansancio en las caras de los más de 1.500 taxistas que se han sumando a la convocatoria. “No nos rendiremos”, declara uno de ellos a este medio. El apoyo es cada vez mayor y trabajadores de todas partes de España y Europa han acudido a Barcelona para exigir “justicia”.

EL DÍA A DÍA DE LA HUELGA

El sector del taxi español se ha reunido este lunes con el Ministerio de Fomento en Madrid para llegar a un acuerdo, pero –por ahora– no ha sido posible. El futuro de la huelga pende de un hilo y, mientras llegan nuevas noticias, los taxistas se divierten como pueden.

Unos improvisan una mesa para echar una partida de cartas, otros juegan con sus hijos pequeños para que se distraigan. El tema de conversación es siempre el mismo: el taxi. “¿Qué pasará con el taxi?”, se preguntan intrigados los huelguistas.

AGUA Y REFRESCOS GRATIS

Algunos organizadores preparan una paella para compartir entre todos. Otros como Silvia y Ramón reparten botellines de agua y refrescos de forma gratuita a los que caminan por Paseo de Gràcia, que estos momentos se encuentra cortado. “¡Vamos, vamos, todos unidos!”, animan a los sedientos.

Los musulmanes, por su parte, se preparan en la shayada (alfombra) para la oración del mediodía. Los turistas, impresionados con la marea de “avispas” que ocupan el centro, inmortalizan el momento con sus móviles. Algo ha quedado bien claro: esta huelga hará historia. En Metrópoli Abierta la hemos seguido desde dentro y durante este lunes hemos recopilado las imágenes más insólitas (y cotidianas) del evento. ¡Allá van!