El primer acto de precampaña de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no se ha celebrado exento de polémica. Mientras ella lanzaba críticas a sus rivales políticos, antiguos compañeros de su equipo municipal se manifestaban contra ella entre bambalinas. Es el caso de Huma Jamshed que –con cartel en mano– recordaba que hace cuatro años fue elegida para representar a su ciudad y, más tarde, apartada por los comuns.
“Hoy he visto a inmigrantes como yo parados frente a Cotxeres de Sants para dar la impresión de que Ada Colau tiene el apoyo del voto inmigrante”, dice en su cuenta de Twitter. “No lo tiene y no deberíamos soportarla otra vez”, incide.
"UTILIZA Y ENGAÑA"
“Utiliza y engaña a los más vulnerables”, lamenta. Los carteles lucen fuertes reproches como “Los inmigrantes no somos tus kleenex, Kolau” o, en tono burlesco, “limpiemos el Ayuntamiento”.
Huma Jamshed, de origen paquistaní y criada en Londres, se incorporó al partido con ICV. En las elecciones de 2015 fue una pieza clave en el distrito de Ciutat Vella, donde Barcelona en Comú (BeC) se llevó más de un 30 % de los votos. Hoy es una de las zonas más castigadas por la gestión de Colau con los narcopisos, la inseguridad, peleas, la falta de limpieza y, ahora, el debate por el Cap Raval Nord.
Ocho meses después de la cita con las urnas, Jamshed fue apartada de los espacios de decisiones y ella tildó este gesto de oportunismo racial. Pero no se quedó de brazos cruzados y mostró su indignación por activa y por pasiva. El partido, por su parte, alegó que debía cesarla por “no cumplir sus funciones”.