El conseller de Interior, Miquel Buch, ha decidido relevar al jefe de los Mossos d’Esquadra, Miquel Esquius, que deja el cargo tras cerca de diez meses comandando la policía catalana. En su puesto, el diputado de JxCat ha colocado al hasta ahora subjefe de la Comisaría General de Información del cuerpo, Eduard Sallent.
Buch apunta que con el nombramiento del nuevo jefe de los Mossos d’Esquadra “se abre una nueva etapa” en la policía tras el período de Esquius. Además, este relevo coincide con el despliegue de la nueva unidad de escoltas del presidente de la Generalitat, Quim Torra, que ha generado malestar en el cuerpo.
CENTRAR EL CUERPO EN LA PRESENTACIÓN DE SEGURIDAD
El miembro de Junts per Catalunya ha afirmado que cuando fue nombrado conseller se planteó "una época puente" para hacer una transición hacia la normalización institucional de los Mossos y ha destacado que en estos meses se ha conseguido retomar esta normalidad y recuperar la confianza del cuerpo.
Esquius, por su parte, ha asegurado que, mirando con perspectiva las dificultades anteriores, está “orgulloso de todo lo que ha hecho el cuerpo de los Mossos y sobre todo de cómo lo ha hecho”. En este sentido, el hasta ahora jefe de la policía afirma que la prioridad es mantener al cuerpo al margen del “debate partidista para centrarlo en la presentación de seguridad”, según avanza El Periódico.
Ferran López, quien ocupó el cargo antes que Esquius, fue el encargado de asumir la dirección de los Mossos durante la aplicación del artículo 155, cuando su antecesor, el mayor Josep Lluís Trapero, fue cesado a finales de octubre de 2017.
EDUARD SALLENT
El nuevo jefe de los Mossos d'Esquadra ha declarado que Miquel Esquius le deja una "organización en perfecto estado para poder atender los retos" que se presentan en materia de seguridad y que los Mossos han demostrado su profesionalidad y su fortaleza ante las dificultades que han tenido en los últimos meses.