El Ayuntamiento de Barcelona impuso más de 1.000 multas a Vehículos de Movilidad Personal (VMP) de explotación económica en 2018, según los datos facilitados por el consistorio a Metrópoli Abierta. Las sanciones son a usuarios o empresas de patinetes eléctricos, segways y bicicletas de alquiler, entre otro tipo de vehículos. Las denuncias, con importes que pueden oscilar entre 100 y 500 euros según la gravedad de las infracciones, ascendieron el año pasado a 1.021.
Del total de las sanciones, 971 fueron para VMP y bicicletas que no cumplieron los "requisitos legales establecidos", apuntan fuentes municipales sin concretar los motivos de las denuncias ni a qué tipos de vehículos. Otras 41 multas son por circular por lugares prohibidos con VMP del tipo A y B, esto es ruedas, plataformas y patinetes eléctricos que pesan entre 25 y 50 kilos y tienen una longitud entre un metro y 1,9 metros, respectivamente. Finalmente, otras nueve sanciones son por ir sin casco con patinetes o plataformas del tipo A.
CASCO OBLIGATORIO DE LOS TIPOS A
El uso de este tipo de vehículos está regulado por la Ordenanza de circulación de peatones y vehículos, que fue modificada en 2017. El artículo 14 se refiere a los VMP y en el caso concreto de los que son de alquiler, la normativa dice que las empresas deben disponer de una licencia, los vehículos deben estar asegurados y en el caso de los VMP tipo A los usuarios deben llevar casco. La regulación también establece que los vehículos A y B deben circular con guía y por las rutas marcadas.
La Ordenanza también establece donde pueden estacionar este tipo de vehículos. Está prohibido atarlos al mobiliario urbano, lo que incluye semáforos, bancos, papeleras y árboles. Tampoco se pueden aparcar "en lugares reservados a otras personas usuarias o servicios" ni a las zonas de servicio del Bicing. De este artículo se debe deducir que los patinetes no pueden aparcar en las barras en forma de "U" para bicicletas. El Ayuntamiento confirma que es así.
RETIRADA POR LA GRÚA MUNICIPAL
Hace unos días, Metrópoli Abierta comprobó como la Guardia Urbana sancionaba a dos patinetes de la empresa Reby atados en un aparcamiento para bicicletas de la calle de Cartagena. Según el agente, estas empresas no pueden aparcar en estos emplazamientos. Acto seguido, la policía se pone en contacto con la grúa municipal para que se lleve los vehículos al depósito. Para recuperarlos, la empresa debe pagar la sanción y el importe establecido por la custodia, como cualquier particular con su coche, afirmó el policía. Reby empezó a operar en diciembre de 2018 y a principios de enero ya acumulaba 53 multas.