Los trabajadores del metro, obligados a no bajar la guardia tras la última alerta. La empresa pública TMB ha averiguado varias negligencias en los trabajos de descontaminar los convoyes y las instalaciones del metro, plagadas de amianto.
Una de las empresas contratadas para hacer esta clase de procesos, Asbesthos Gestión Desamiantados (AGD), parece que ha devuelto dos piezas descontaminadas pero que, tras la revisión, continuaban intoxicadas de la fibra.
REVISAR LOS PROTOCOLOS
Tras comprobar si era cierto o no, la compañía pública se ha visto obligada a revisar los protocolos y decidir incrementar los controles para desamiantar los espacios, ya que otros usuarios del metro podrían contaminarse de la fibra, además del conjunto de empleados.
Los errores se han encontrado en dos fases: tras unas pruebas medioambientales de los equipos de Tren Stop, un sistema de seguridad de los trenes y otra parte que formaba parte de la red de TMB que, a pesar de llevar la etiqueta de “desamiantado”, continuaba con restos de dicha fibra tóxica.
EXPEDIENTES DE NO CONFORMIDAD
Ahora TMB se ha visto obligada a abrir dos expedientes de no conformidad contra ambas compañías y exigen a la empresa una mejora del plan de calidad para garantir que el amianto se ha sacado al 100%.