Los alrededores del Camp Nou se encuentran blindados por las fuerzas de seguridad a falta de horas para el inicio del Clásico. El FC Barcelona y el Real Madrid disputarán un duelo trascendental en liga, en el que está en juego el liderazgo de la competición, bajo un clima de tensión promovido por Tsunami Democràtic y sus acciones durante la jornada de hoy.
COMPROBACIONES
Agentes de los Mossos d'Esquadra están llevando a cabo todo tipo de comprobaciones de seguridad ante un encuentro declarado de "alto riesgo". Restricciones de tráfico, análisis del subsuelo con la ayuda de la unidad canina y una constante vigilancia aérea desde un helicóptero en todo momento son algunas de las medidas que adoptadas para garantizar la seguridad en las horas previas al choque.
La seguridad privada, que sumará un total de 2.000 efectivos, complementa un dispositivo que asegurará cada bolsa que llegue a las gradas del estadio blaugrana.
PELOTAS HINCHABLES Y OTRAS ACCIONES
Entre las acciones confirmadas por Tsunami Democràtic, se encuentra el rodeo del Camp Nou a las 16 horas y la lluvia de pelotas hinchables en el transcurso del encuentro.
El colectivo independentista también ha explicitado que a las 20 horas se podrá "ver el partido y el mensaje 'Spain, sit and talk'", y ha animado a los manifestantes a llevar consigo "radio, agua y bocadillos".
LOS JUGADORES, EN EL MISMO HOTEL
Ante esta situación excepcional, los jugadores de ambos clubes se encuentran en el hotel Sofía debido a su proximidad al estadio blaugrana. Tan solo tres plantas separan a los protagonistas de un encuentro que contará con Alejandro Hernández Hernández como colegiado.
Se prevé que minutos antes de las 18 horas los dos equipos se desplacen juntos hacia el Camp Nou, donde las fuertes medidas de seguridad deberán asegurar la llegada de ambos conjuntos burlando la protesta de Tsunami.