La memoria histórica vuelve a ser el objetivo de la ultraderecha en Barcelona. Este miércoles por la mañana, el faristol en homenaje al ex presidente de la Generalitat Lluís Companys ha amanecido pintado con una esvástica nazi.
Esta obra está ubicada en el número 633 de la Gran Via de la capital catalana y pretende ser un homenaje a la figura del ex alto mandatario catalán, que fue fusilado por los franquistas en 1940.
El Ayuntamiento de Barcelona ha salido al paso rápidamente tras esta muestra de incivismo en la Ciudad Condal y ha asegurado que mandará limpiarla "lo más pronto posible".
NO ES EL PRIMER ATAQUE A SU FIGURA
No es la primera vez que la extrema derecha barcelonesa ataca a la memoria del político republicano. Sin ir más lejos, en 2014, unos neonazis dibujaron otra esvástica en la tumba donde reposan los restos del ex President, en el Fossar de la Pedrera, en el cementerio de Montjuïc.
Cabe recordar que Companys fue ejecutado por orden de Franco el 15 de octubre de 1940 después de que el 13 de agosto del mismo año agentes de la policía militar de Hitler detuvieron a Companys en una casa de La Baule-les-Pins (Francia). Lo entregaron a las autoridades franquistas 16 días después, que lo torturaron y, posteriormente, lo fusilaron.