El cardenal Omella, en un momento de la misa / TWITTER @esglesiabcn

El cardenal Omella, en un momento de la misa / TWITTER @esglesiabcn

El pulso de la ciudad

El Arzobispado de Barcelona pide disculpas por la polémica misa

La diócesis muestra su "desconcierto" ante las críticas y defiende que se respetaron las medidas sanitarias

8 noviembre, 2020 22:07

Noticias relacionadas

El Arzobispado de Barcelona ha pedido disculpas a aquellas personas que se hayan sentido "heridas" por la polémica misa en la Sagrada Familia que acogió a unas 550 personas. En un comunicado la diócesis, sin embargo, muestra su "desconcierto por la respuesta de las autoridades" por una ceremonia "que cumplía todos los requisitos legales y condiciones sanitarias".

El acto religioso, al que asistió el mismo arzobispo Juan José Omella y representantes de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona como el teniente de Seguridad, Albert Batlle, sirvió para beatificar a Joan Roig, fusilado en 1936 por grupos anarquistas.

CENSURA DE LA GENERALITAT

El departamento de Salud de la Generalitat avanzó ayer que iniciará un expediente para investigar si en el acto celebrado en la Sagrada Familia se han cumplido todas las medidas de protección. La consellera de Salud, Alba Vergés,y el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, han censurado la celebración de este acto.



En el comunicado, el arzobispado subraya que la beatificación de ese joven laico estaba prevista "desde hacía un año", pero que ha coincidido en un momento "especialmente delicado" por la pandemia. Por una parte, el arzobispado y la Asociación de Amigos de Joan Roig Diggle, como organizadores del acto, piden "disculpas a aquellas personas que se hayan sentido heridas, mientras sufrimos restricciones en nuestra vida laboral y familiar", dicen.

APOYO A LA CULTURA

No obstante, recuerdan que la misa "se celebró cumpliendo escrupulosamente todas las medidas exigidas por la legislación vigente". La institución católica explica que todas las autoridades habían recibido una invitación para asistir a la misa y que se ofreció la posibilidad de seguir el acto por radio, televisión e internet. 

Ante las críticas vertidas desde sectores como la cultura, el arzobispado asegura que se une "a la petición del mundo de la cultura y de la restauración para que lo antes posible se pueda reiniciar su actividad económica, con las medidas oportunas que minimicen el riesgo de contagio".