El sector de la restauración de Cataluña ha hecho llegar a la Generalitat una propuesta para reabrir bares y restaurantes al 50% a partir del 14 de noviembre, esto es desde el próximo sábado. La iniciativa se trasladó el pasado día 6 al Govern en una reunión encabezada por el secretario general de Salut, Marc Ramentol.
Según el documento al que ha tenido acceso Metrópoli Abierta, el sector plantea un uso, tanto en interior como en terrazas, de cuatro personas por mesa, salvo que los núcleos de convivencia sean de seis. También se compromete a controlar que los clientes hagan uso de la mascarilla de forma obligatoria si no se están ingiriendo alimentos o bebidas, y a limitar la sobremesa en interiores a una hora.
REGISTRO DE CLIENTES Y AGENTES COVID
El sector dice que los establecimientos crearán un registro de clientes -y que en caso de detectar un positivo se comunicará a las autoridades sanitarias- y pondrán en marcha la figura de agentes covid para asegurar que se cumplen las medidas.
El documento subraya también que no se podrán hacer uso de las barras y que se garantizará la ventilación interior y la distancia mínima de 1,5 metros entre comensales que no sean del núcleo de convivencia.
La propuesta del sector es adaptar los horarios al toque de queda, que prohíbe salir desde las 22.00 a las 06.00 horas salvo que sea por ir al trabajo o por temas médicos. Las propuestas de los restauradores solo se aplicarían en las regiones sanitarias con un índice de rebrote por debajo de 0,9.
PRÓRROGA DE LAS RESTRICCIONES
Las medidas propuestas por la restauración podrían quedar por ahora en saco roto. Según ha avanzado Ramentol este lunes en Rac 1, la intención de Salut es prorrogar 15 días más las restricciones impuestas, y así lo trasladará esta semana al Procicat (Protección Civil de Cataluña). La prolongación afectaría al cierre de bares y restaurantes, al toque de queda y al confinamiento perimetral.
A la reunión con la Generalitat, que tuvo lugar el pasado 6 de noviembre, asistieron representantes del Gremi de Restauració y de las federaciones de hostelería de Barcelona, Lleida, Tarragona y Girona. Hasta la fecha, en Cataluña han cerrado 2.600 negocios, según el sector.