La Audiencia Nacional inicia este martes, 10 de noviembre, el juicio por los atentados del 17 de agosto de 2017 en Barcelona y Cambrils. En el litigio, los tres acusados se enfrentan a una petición fiscal de entre 8 y 41 años por su presunto papel en la célula que acabó con la vida de 16 personas y dejó a 140 heridos.
Se sentarán en el banquillo Mohamed Houli Chemlal, superviviente de la explosión en el chalé de Alcanar (Tarragona); Driss Oukabir, a cuyo nombre se alquiló presuntamente la furgoneta utilizada en Las Ramblas; y Said Ben Iazza, quien según las acusaciones supuestamente prestó su documentación y su furgoneta isotérmica para comprar y transportar precursores explosivos.
Varias personas rinden homenaje a las víctimas de los atentados en Barcelona, en las Ramblas / EFE
PENAS DE PRISIÓN
Para los dos primeros la Fiscalía pide 41 y 36 años de prisión, respectivamente, por los delitos de integración en organización terrorista, fabricación, tenencia y depósito de sustancias explosivas; y conspiración para el delito de estragos terroristas; y para el tercero 8 años de cárcel por colaboración con la célula.
Ninguno fue procesado como responsable de las muertes y de los heridos, pero el tribunal dejó la puerta abierta a que las partes lo planteasen en sus escritos. En consecuencia, las parten piden penas que van de la prisión permanente para Oukabir y Houli Chemlal hasta los ocho años de cárcel para Ben Iazza.
TRES AÑOS DE LOS ATENTADOS
Ocurrió poco antes de las cinco de la tarde del 17 de agosto de 2017, cuando Younes Abouyaaqoub entraba a La Rambla de Barcelona "a gran velocidad" al volante de una furgoneta alquilada. Zigzagueó "arrollando a las personas que por allí caminaban". Entre los documentos que se encontraron en el vehículo estaba el pasaporte de Houli Chemlal y el contrato de alquiler a nombre de Oukabir.
Al día siguiente cinco miembros de la célula llegaron al paseo marítimo de Cambrils "atropellando a viandantes" y "agrediendo a las personas que se encontraban a su paso". Todos fueron abatidos por los Mossos, también Abouyaaqoub el 21 de agosto en el Penedés. 16 personas murieron en los atentados y 140 resultaron heridas.
Un grupo de Mossos se dirige hacia su punto de reunión tras el acto de homenaje del pasado 17A en las Ramblas / MIKI