El primer teniente de alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, ha culpado del monumental atasco en la ciudad el pasado lunes, en el pleno puente de la Inmaculada, al cierre de los centros comerciales. El líder del PSC en el consistorio lo ha dicho en la presentación de una campaña para que los barceloneses recuperen la Rambla y acudan a comprar y a comer al popular paseo.
Para evitar que el colapso circulatorio se repita los próximos días, durante los días de compras navideños, el Ayuntamiento ha pedido a la Generalitat que autorice la reapertura de los centros comerciales, al menos en todo el entorno metropolitano.
LAS RESTRICCIONES PROVOCAN AGLOMERACIONES
Además, Collboni ha explicado que la propuesta del consistorio barcelonés es que los fines de semana la movilidad se amplíe, al menos, a todo el Área Metropolitana de Barcelona. Según el edil, la capital catalana es una ciudad "muy densa" y el hecho de que se restrinjan los movimientos puede provocar "aglomeraciones".
Este año, el consistorio ha hecho un llamamiento a comprar en el centro de la ciudad. Buena parte de los establecimientos están en "parada" por los efectos de la pandemia. Collboni ha recomendado a los ciudadanos moverse por la ciudad en transporte público, a pie o en bicicleta y dejar el coche en casa. "El transporte público es un medio seguro. Ahora está en un 60% de ocupación".