Jaume Asens participó en la estrategia para vetar la construcción de un hotel en la antigua casa okupa Buenos Aires. Maniobras que ahora investiga un juez y por las que se imputa (desde 2015 se usa el término "investiga") un delito de prevaricación a Janet Sanz, actual teniente de alcalde de Urbanismo.
Cuando todavía era concejal de Barcelona En Comú en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, Asens llegó a admitir en 2019 que "se había suspendido [la licencia] de forma provisional" porque habían pedido "un informe a Patrimonio del Ayuntamiento sobre la posibilidad de catalogar la finca". Declaraciones que están registradas en el acta y a las que ha tenido acceso Crónica Global.
PRESIÓN A LOS DUEÑOS
Una estrategia de presión a la propiedad del edificio, la inmobiliaria London Private Company, para que vendiera el activo a la administración, tras plantear la catalogación exprés de la torre. Además este intento habría servido también para probar de rebajar su precio: "Nosotros entramos en negociaciones con el propietario para comprar el edificio (...) En su momento, hace apenas unos mesas, pedían mucho dinero (...) Si finalmente acaba siendo posible catalogarlo, evidentemente las pretensiones de la propiedad bajarán".
El actual diputado en el Congreso por Unidas Podemos –y presidente del grupo parlamentario– había admitido segundos antes que la petición de licencia para un hotel era "un acto reglado" y que si se daban "los requerimientos" podrían obtenerla. Aun así, desgranó la estrategia municipal para frustrarlo. Declaraciones que coincidieron en el tiempo con dos actuaciones polémicas del Ayuntamiento: la mansión fue okupada en marzo de 2019 y los Mossos d'Esquadra intentaron desalojarla dos veces en 2020, pero el consistorio condenó los intentos de desahucio y se negó a conceder las licencias de derribo y obras.
LA SITUACIÓN JUDICIAL
El Juzgado de Instrucción número 12 de Barcelona investiga posibles delitos de prevaricación, obstrucción a la justicia, coacciones y omisión del deber de impedir un delito perpetrados por el equipo de Urbanismo del Ayuntamiento, con Janet Sanz al frente. Y las declaraciones de Asens no ayudarán para nada a la defensa municipal. Fuentes de la opisición aseguran que hay nervios en el seno del ejecutivo local por lo que pueda llegar a ocurrir.