Asociaciones del barrio de Sant Antoni de Barcelona se han unido para exigir la apertura del pequeño comercio considerado no esencial durante los fines de semana. También han aunado fuerzas para condenar la prolongación de las medidas del Procicat, que ha obligado a mantener cerradas sus puertas durante ocho sábados consecutivos.
"El sábado es uno de los días que las tiendas pueden hacer una venta superior a la diaria, y en estos ocho sábados hemos perdido estas ventas extra, la venta de carnaval y San Valentín, además de las rebajas", han alertado en un comunicado este sábado.
"FAVORECE A LOS GRANDES COMERCIOS"
Han tachado de incomprensible que grandes superficies con mayor aforo continúen abiertas los sábados y puedan vender productos no esenciales: "Es una medida que favorece a los grandes comercios y multinacionales mientras empequeñece y deja fuera del juego al pequeño autónomo y trabajador".
Así han exigido que las medidas "se flexibilicen para paliar los efectos económicos que producen al comercio local" y han reclamado que se tomen otras soluciones que no impliquen mantener cerrado el pequeño negocio como medida de prevención ante el coronavirus. Además han anunciado que si el próximo sábado tienen la obligación de seguir cerrados, abrirán a media persiana y pondrán cruces negras como acto de protesta para dar visibilidad a su queja.