El Tribunal Supremo ha dado la razón a un anciano de 80 años del barrio de la Salut (Gràcia) que denunció a la propiedad por desahuciarlo. Todo comenzó en 2001. Francisco Sánchez García tenía problemas económicos y llegó a un acuerdo con la antigua propiedad del inmueble que le permitió pasar a vivir al sótano a cambio de una rebaja en el alquiler.
PROBLEMAS CON EL NUEVO PROPIETARIO
El cambio se formalizó con un anexo del contrato de renta antigua, según ha avanzado Naciódigital. Sin embargo, la llegada en 2017 de un nuevo propietario supuso otro quebradero de cabeza para este vecino. El nuevo administrador no quería renovar el contrato de ningún vecino, y ante la imposibilidad de finalizar el acuerdo con Francisco –ya que los contratos de renta antigua son indefinidos– lo demandó argumentando que el anexo, era en realidad, un nuevo contrato.
Un juzgado de primera instancia dio la razón a Sánchez, pero después la Audiencia de Barcelona sentenció a favor de la propiedad. Ante esta situación, en 2019 Francisco Sánchez presentó un recurso al Supremo, y tras haber sido desahuciado en febrero de 2020 mientras no estaba en casa, ahora este le da definitivamente la razón. La sentencia es firme y no se puede recurrir, por lo que la propiedad tendrá que devolverle piso.