El Departamento de Salud prevé comenzar a vacunar pronto, probablemente en un plazo de dos semanas, a los menores de 50 años, empezando por los más mayores (40-49 años), y también reabrir en breve el ocio nocturno de forma regulada, para minimizar los botellones.
Los indicadores epidémicos no acaban de caer en Cataluña, con 644 nuevos contagios en las últimas 24 horas y la notificación de otras 11 muertes por COVID, mientras que el descenso de hospitalizados se ralentiza.
VACUNACIÓN
En sus primeras declaraciones una semana después de tomar posesión del cargo, el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ha preferido no concretar una fecha para la vacunación por debajo de 50 años y solo ha dicho que será "pronto". "Cuanto antes mejor, en este sentido estamos trabajando", ha añadido, y ha señalado que cuando tengan la fecha exacta la dirán pero no antes, para no "colapsar de llamadas" a los CAP.
Ha precisado que empezarán por la franja de 40 a 49 años porque han observado que en estas edades la COVID todavía puede causar "mucho daño", mientras que por debajo de los cuarenta los casos críticos son "menos frecuentes".
Una vez se termine la franja de 40 a 49, la previsión es que en julio se abra al grupo de 16 a 39 años, con la incógnita de cuándo le llegará el turno a los adolescentes de 12 a 15 años.
APERTURA DEL OCIO NOCTURNO
Con los datos epidémicos estabilizados, el conseller ha apostado por reabrir "pronto" el ocio nocturno de forma regulada, porque cree que contribuirá a minimizar los botellones, aunque tampoco no le ha puesto una fecha concreta, si bien su predecesora en el cargo, Alba Vergés, lo situó entorno a san Juan.
El titular de Salud también ha apuntado que próximamente se podría ampliar el horario de los bares, que actualmente tienen que cerrar a medianoche, aunque ha asegurado que no se alargará hasta las 2 de la madrugada.