La llamada ley rider, que obliga a las plataformas digitales de reparto a contratar como asalariados a sus repartidores, entra en vigor este jueves, 12 de agosto. La nueva norma, fruto del acuerdo entre el Ministerio de Trabajo y Economía Social, CCOO y UGT y las organizaciones empresariales CEOE y Cepyme, no afecta sólo a empresas de reparto de comida como Glovo, Uber Eats y Deliveroo, sino a todas las plataformas del sector.

La ley reconoce la presunción de laboralidad de los trabajadores, en línea con la sentencia que dictó el Tribunal Supremo en septiembre de 2020, en la que establecía que los repartidores son trabajadores por cuenta ajena y no autónomos. Asimismo, contempla que la representación legal de los trabajadores deberá ser informada de las reglas que encierran los algoritmos y los sistemas de inteligencia artificial que pueden incidir en las condiciones laborales por las que se rigen las plataformas, incluyendo el acceso y mantenimiento del empleo y la elaboración de perfiles.

La norma ha sido muy criticada por asociaciones de repartidores. Entre ellas la Asociación de Plataformas de Servicios bajo demanda (APS), que engloba a las principales plataformas de food delivery en España, Deliveroo, Stuart, Glovo y Uber Eats, y que advirtió en su día de que esta ley pone en riesgo el desarrollo de un sector que aporta más de 700 millones de euros al PIB español.

DELIVEROO AMENAZA CON IRSE DE ESPAÑA

A finales de julio, a pocos días de la entrada en vigor de la ley, Deliveroo amenazó con cesar sus operaciones en España, y anunció una consulta entre sus empleados sobre el fin de su actividad. En caso de que en la consulta se opte por poner fin a sus operaciones, la empresa ha afirmado que riders y empleados tendrán un paquete de compensación adecuado que cumpla con todas las normativas y la legislación local.

DENUNCIAS CONTRA GLOVO ANTE LA INSPECCIÓN

Por su lado, Glovo anunció hace un tiempo el lanzamiento de un nuevo modelo de autónomos "inédito en España" y la contratación de 2.000 trabajadores antes de que finalice 2021 para adaptarse a la normativa.

No obstante CCOO de Cataluña ha informado de que ha presentado dos denuncias contra ellos ante Inspección de Trabajo por incumplir los derechos laborales de sus trabajadores y "desafiar la ley rider abiertamente sin hacer el intento de adaptarse a la normativa".

JUST EAT NEGOCIA UN CONVENIO

Por su parte, Just Eat se encuentra negociando con UGT y CCOO para fijar las bases del que será el primer convenio colectivo del sector del delivery en España. En concreto, este convenio será el primero a nivel nacional que ayude a organizar las relaciones laborales de la economía de plataformas en el reparto de comida a domicilio y estará totalmente alineado con la ley rider.

UBER EATS Y STUART

Por su parte, el despacho SBO Abogados está recabando información para interponer demandas individuales acumuladas contra Uber Eats por romper la relación laboral con los trabajadores autónomos, así como por "cesión ilegal" de repartidores a subcontratas. Y es que Uber Eats ha comunicado en un mensaje interno que los autónomos no podrán seguir proporcionando servicios de reparto a partir de este jueves.

Desde Stuart, la dirección reivindica un modelo flexible basado en repartidores independientes. A pesar de que la empresa considera esta alternativa como la más beneficiosa para todas las partes, ha señalado que mantiene un "gran compromiso" con el mercado español y ha manifestado su deseo de cumplir con los requisitos de la nueva legislación. En este sentido, la compañía ya ha empezado un proceso de contratación directa de parte de su flota. Al mismo tiempo, y como contempla la nueva normativa, ha anunciado que contará con repartidores profesionales.

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