Una familia antivacunas ha fallecido, en Portugal, después de contagiarse de coronavirus. El matrimonio formado por Basil Goncalves (73) y su esposa Charmagne (65), así como su hijo Shaul (40), murieron tras haber rechazado la inyección y haber celebrado una cena familiar en la que se produjo el contagio de los miembros.

Según otro hijo de la pareja que no acudió a la cena, Francis, la familia se había mudado de Gales a Portugal y no estaba inmunizada porque estaban asustados por la desinformación antivacunas.

CONTAGIO EN EL HOSPITAL

Según ha explicado Francis a Wales Online, fue el padre quien primero se contagió tras una visita al hospital. Dos días más tarde se celebró la cena y, otras 48 horas después, comenzaron los síntomas.

El empeoramiento del estado de salud de la familia provocó el ingreso del matrimonio y su hijo, quien fue el primero en fallecer seis días después de su llegada al centro médico.

El padre murió dos días después que su hijo, y la madre lo hizo pocos días más tarde que su marido tras haber entrado en coma inducido. Los tres fallecimientos se produjeron en un breve lapso de tiempo.

INFORMACIÓN ANTIVACUNAS

Francis ha asegurado que las autoridades portuguesas quedaron sorprendidas, ya que afirmaron que nunca habían tenido que enterrar a tres miembros de una misma familia con tan pocos días de diferencia.

Tras las muertes, el hijo pidió que este caso sirviera de ejemplo para incentivar la vacunación y rechazar la propaganda antivacunas que circula en internet.

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