El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) deliberará este lunes sobre la decisión del Govern de aplicar un confinamiento nocturno –de 1:00 a 6:00 horas de la madrugada– a 62 municipios, entre los que se incluyen los 19 ya aprobados el jueves.
CONFINAMIENTO NOCTURNO
La sala Contenciosa recibió el pasado viernes una nueva petición y la trasladó al Ministerio Fiscal, "ya que son medidas que afectan a derechos fundamentales".
La restricción de movilidad entre la 1:00 y las 6:00 horas de lunes a domingo afectaría a municipios de más de 5.000 habitantes con un índice de incidencia acumulada igual o superior a 250 casos diagnosticados por 100.000 habitantes en los últimos 7 días, y a los de más de 20.000 habitantes con un índice de incidencia acumulada superior a 125 casos por 100.000 habitantes en la última semana.
Aspecto de las calles de Gràcia tras una noche de botellones / EFE - Quique García
62 MUNICIPIOS
Con este cambio, quedarían afectados un total de 62 municipios: Alcarràs, Amposta, Arenys de Munt, Badalona, Badia del Vallès, Balaguer, Banyoles, Barberà del Vallès, Barcelona, Blanes, Calafell, Cambrils, Celrà, Cervelló, Cornellà de Llobregat, El Prat de Llobregat, El Vendrell, Esparreguera, Esplugues de Llobregat, Figueres, Gavà, Gelida, Girona, Igualada, L’Hospitalet de Llobregat, Lleida, Lloret de Mar, Manlleu, Manresa, Martorell, Mataró, Montblanc, Montcada i Reixac, Móra d’Ebre, Olesa de Montserrat, Palafolls, Palafrugell, Pineda de Mar, Premià de Mar, Reus, Ripollet, Rubí, Sabadell, Salou, Salt, Sant Adrià del Besòs, Sant Andreu de la Barca, Sant Boi de Llobregat, Sant Feliu de Guíxols, Sant Feliu de Llobregat, Sant Joan Despí, Sant Vicenç dels Horts, Santa Coloma de Gramenet, Sarrià de Ter, Tarragona, Terrassa, Torroella de Montgrí, Valls, Vic, Viladecans, Vilafranca del Penedès y Vila-Seca.
FIESTAS ILEGALES
Sobre el tribunal puede pesar lo vivido este fin de semana en algunas poblaciones de Cataluña, poniendo el foco en la Ciudad Condal y los municipios de la Costa Brava. Este domingo los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana desalojaron a 5.500 personas que no estaban cumpliendo con la normativa estipulada. En total, los agentes dispersaron a 4.000 personas Gràcia –donde se celebraban las fiestas–, aunque también actuaron en el litoral barcelonés, en la playa de Sant Miquel y en el Born.