Los restauradores de Barcelona están de enhorabuena. Finalmente, la bonificación del 75% de la tasa de terrazas se prorrogará al próximo año. Hace casi tres semanas, Metrópoli ya avanzó que la reducción del tributo para bares y restaurantes estaba casi cerrada.
La regidora de Hacienda y Comercio, Montserrat Ballarin, ha confirmado este viernes que la bonificación se aprobará en el pleno del próximo jueves, 23 de diciembre, junto al resto de Ordenanzas fiscales. Tasas e impuesto se congelan en Barcelona en 2022.
EL SECTOR Y LA OPOSICIÓN, A FAVOR
En un principio, el gobierno de PSC y Barcelona en Comú dejó fuera de las Ordenanzas fiscales la propuesta de bonificación, aunque dejó la puerta abierta a negociarlo con el sector y los grupos de la oposición, que de forma unánime reclamaron la prórroga.
Además de la aprobación de las Ordenanzas fiscales para 2022, el último pleno del año debe validar el presupuesto municipal, que ascenderá a 3.406 millones de euros, el más alto de la historia de la ciudad.
En comisión, el voto favorable de Barcelona pel Canvi permitió proseguir con su tramitación. Ahora, con la abstención garantizada de ERC, que ha tenido que echar marcha atrás a su posicionamiento negativo tras el acuerdo entre republicanos y comunes en el Parlament para sacar adelante las cuentas autonómicas, el presupuesto de Ada Colau y Jaume Collboni saldrá refrendado.
183 MILLONES
Este viernes, Collboni, primer teniente de alcaldía, Ballarín y Jordi Martí, teniente de alcaldía de Cultura y concejal de Presupuestos, han detallado actuaciones por valor de 183 millones de euros que se han incorporado a las cuentas definitivas.
Estos 183 millones prevén 168,6 millones, provenientes de partidas genéricas, para inversiones, y 14,7 millones para gasto corriente, que salen del Fondo de Contingencia [ver aquí la nota de prensa].
TRES MILLONES PARA LA RAMBLA
Entre las inversiones previstas figuran tres millones de euros para la reforma del primer tramo de la Rambla, en Drassanes; 7,7 millones para la ampliación del Hospital del Mar, dos millones para la restauración del Hivernacle de la Ciuadella, y otros 1,5 para la rehabilitación de Can Batlló.