Un juez de Barcelona le devuelve la pensión íntegra por incapacidad permanente a una mujer que había sufrido un cáncer de pulmón. El Juzgado de lo Social de la capital catalana ha dictaminado que, a pesar de que la mujer ya se había curado de la enfermedad, las secuelas físicas que continúa padeciendo la incapacitan para realizar cualquier actividad laboral con normalidad.
La mujer sufre de debilidad o astenia moderada y de disnea o dificultades respiratorias a causa de la dolencia que sufrió, consecuencias derivadas del cáncer de las que no se ha curado pese a haber eliminado el cáncer de su cuerpo.
METÁSTASIS EN EL HÍGADO
Aún así, el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) decidió reducirle la pensión que le habían otorgado cuando se la declaró curada del cáncer después de años de tratamiento, pues lo sufrió entre los años 2016 y 2019.
Durante este tiempo, ella también sufrió una metástasis por la que de los pulmones se le extendió al hígado, hecho que precipitó retomar las sesiones de quimioterapia y radioterapia.
UN INFORME MÉDICO CLAVE
Uno de los elementos clave que han servido para decantar la decisión del magistrado ha sido el informe médico presentado durante el juicio que deja patente que la mujer sufrió la disnea y la astenia desde el inicio de la enfermedad, dolencias que aparecen ante cualquier mínimo esfuerzo físico.
Por ello, han condenado al INSS ingresarle de nuevo la pensión íntegra.