Todos los autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) llevarán cámaras se seguridad en un año, antes de que acabe 2023. El objetivo de la empresa es combatir los robos y las agresiones y las situaciones de abuso que se puedan producir durante un trayecto, entre ellas las sexuales y las LGTBIfóbicas.
En total, los vehículos de TMB incorporarán 4.500 cámaras. La idea es que haya buses que puedan tener hasta siete aparatos de videovigilancia, dependiendo de las dimensiones del mismo. A lo largo de los últimos meses, la compañía ha hecho una prueba piloto en 170 buses.
CONECTADAS CON EL CENTRO DE CONTROL DE BUS
Las cámaras de los buses graban en todo momento y están conectadas con la Centro de Control de Bus. Las imágenes se guardarán durante un mes y después se borrarán.
El verano de 2021, la entonces presidenta de TMB, Rosa Alarcón, explicó que el contrato había salido a licitación por unos seis millones de euros. Ahora, la máxima responsable política de la empresa es la edil Laia Bonet.
MÁS DE 8.000 CÁMARAS EN EL METRO
La red de metro ya cuenta con más de 8.000 cámaras instaladas en los vagones y en los andenes y otras zonas de las estaciones.