El 2022 no ha sido un buen año para las personas trans de Barcelona. Los miembros que integran este colectivo se han convertido en uno de los principales objetivos de los agresores en la capital catalana.
Así lo ha constatado el informe anual realizado por el Observatori contra l'Homofòbia que confirma que, a pesar de la reducción del número de agresiones, estas se han recrudecido tanto en la capital catalana como en toda Catalunya. Tan es así que es el primer año en el que las agresiones físicas superan a las verbales. La capital catalana cierra el ciclo con 101 incidentes en la capital y un aumento del 38,1% de los incidentes experimentados por miembros del colectivo trans.
Se han convertido en un nuevo objetivo. Sin embargo, el número de agresiones todavía no supera la cifra de agresiones de hombres gays, que alcanza las 115 incidencias, aproximadamente. Si se contempla el origen de la discriminación, la gayfobia roza los 130 incidentes mientras que la transfobia roza los 50 altercados.
Las agresiones "son menos, pero más intensas", ha ponderado el presidente del Observatori, Eugeni Rodríguez, que ha alertado a este medio que el número de agresiones físicas ha aumentado un 20,4%
OCIO NOCTURNO, UN PUNTO CALIENTE
Del citado informes se extrae que el ocio nocturno se ha convertido en uno de los puntos calientes de las discriminaciones o agresiones para todo el colectivo. No se trata solo de derechos de admisión a lugares como discotecas, sino también de insultos e incluso ataques físicos. Según los datos que maneja el Observatori, solo se habrían producido 14 incidentes en lugares de ocio nocturno en toda Catalunya -un aumento del 75% con respecto a 2021-. De estos, la mayoría han tenido lugar en Barcelona y su provincia.
No obstante, aclaran, no se trata solo de lo que ocurre dentro de los locales, sino de lo que tiene lugar en las inmediaciones. Los ataques que tienen lugar, por ejemplo, a las puertas de una discoteca, un bar, o camino al transporte público se contemplan como ataques en la vía pública. La Comunidad Autónoma registra así más de 80 ataques y de nuevo la mayoría se registran en la capital catalana y las localidades aledañas.
EL CENTRO DE BARCELONA, ZONA CRÍTICA
Los informes facilitados a este medio no detallan el número de agresiones por zonas dentro de la capital catalana. Aun así, existen los distritos "negros", es decir, las zonas donde más se concentran los ataques a todo el colectivo. Estos son el Eixample, Sant Martí y Ciutat Vella. Coincide además que estos distritos aglutinan las principales zonas de ocio nocturno de la capital catalana.
Desde la entidad reflexionan que el recrudecimiento de las agresiones, el foco en el ocio nocturno y las inmediaciones de los locales, el aumento de las incidencias en la vía pública y el transporte urbano y el descenso de agresiones no presenciales -como insultos y amenazas a través de redes sociales y mensajería- se debe a la caída de las restricciones por la pandemia. Al recobrarse la normalidad, las muestras de discriminación y delitos de odio contra el colectivo ya no se producen tanto a través de plataformas, sino que los agresores atacan a plena vista, "en cualquier lugar y a cualquier hora del día".