Los comercios emblemáticos de Barcelona están en peligro y han creado un plan de choque para evitar más cierres. La discoteca Merlín, el mítico Caffe San Marco, Calçats Palou y la panadería Giraut son solo algunos de los muchos negocios históricos que han bajado la persiana para siempre en los últimos meses. La inflación, los fondos buitre y las consecuencias del coronavirus han sido las principales causas de este problema que afronta la capital catalana.
Por este motivo, han creado la alianza municipal europea con París, Roma y Lisboa en la Jornada Internacional de Comercio Emblemático en Ciudades Europeas. La capital catalana ha firmado la Declaración de Barcelona para preservar y promocionar los comercios emblemáticos de la ciudad.
DECLARACIÓN DE BARCELONA
Este documento pretende impulsar medidas de gobierno y planes especiales que favorezcan la viabilidad económica, conservación patrimonial y papel comercial de este tipo de negocios, que tienen que participar en la cocreación de las políticas municipales sobre el comercio de proximidad para garantizar la competitividad y avanzar en la profesionalización del sector y en la digitalización.
Para conseguir dichos objetivos, se creará una carta internacional para definir los niveles de protección patrimonial de las ciudades firmantes, así como un plan de acción anual para evaluar si se han cumplido con las medidas que se promueven en la Declaración de Barcelona.