Año negro para Barcelona en materia de agresiones sexuales. Tras hacerse público el Balance de criminalidad de 2022 ha quedado patente que los delitos contra la libertad están en auge en la capital catalana. Tan es así que, según datos oficiales del Ministerio de Interior se calcula que en la capital catalana solo las agresiones sexuales con penetración han subido un 15,2%, mientras que los delitos sexuales, en general, un 27%.
Para algunos hospitales, este año ha significado un punto de inflexión en lo que a atención frente a este tipo de delitos se refiere. El Hospital Clínic de Barcelona, por ejemplo, batió en 2022 un récord histórico de atención a agresiones sexuales. En total, hasta 659 víctimas pasaron por las urgencias del centro sanitario, lo que supone un incremento del 41% con respecto a 2021.
Según queda plasmado en el informe presentado por la institución sanitaria, el 90% de las víctimas son mujeres. De ellas, el 58,3% fueron víctimas de una violación. La mitad del total de mujeres agredidas tenían menos de 25 años. Además, el texto detalla que los días de la semana donde se producen más casos de este tipo son los viernes, sábados, domingos y lunes.
LOS AGRESORES, SOLO HOMBRES
Por otra parte, el 100% de los agresores eran hombres. Una cifra que no ha crecido son las de las agresiones sexuales en grupo, que se mantienen en el 10% del total. No crecen en porcentaje, aunque sí en cantidad, algo evidente cuando se tiene en cuenta que el número de agresiones se ha disparado por completo.
Los lugares en los que es más común que se produzcan las violaciones son, según constata el estudio, los domicilios (44,3%), seguidos de locales de ocio nocturno (16,5%).
Asimismo, la velocidad con la que las víctimas acuden al hospital también ha crecido. Si en 2021 el 54,7% de las mujeres acudía al hospital antes de 72 horas tras la violación y el 40% antes de las 24 horas, este año el 81% ha llegado antes de tres días y el 66% han acudido al centro en menos de una jornada. En cualquier caso, el informe evidencia lo disparada que está en la capital catalana esta lacra social.